Seis poemas

Seis poemas

Colaboraciones Araceli Mancilla Zayas VIERNES La placidez de escuchar al mar entre las hojas vaivén cercano que se ausenta para dar paso a la luz de ella surgen remolinos que entran en la casa sin alboroto atraviesan cristales acariciando el piso...Tomado de https://morfemacero.com/

Colaboraciones

Araceli Mancilla Zayas

VIERNES

La placidez de escuchar al mar

entre las hojas

vaivén cercano que se ausenta

para dar paso a la luz

de ella surgen remolinos

que entran en la casa sin alboroto

atraviesan cristales acariciando el piso

música revivida en los ojos

destello a la orilla de las sombras

entonces el mar vuelve a escucharse

en el jardín

entre ramas de dos árboles

cadencia luminosa

detenida un momento

en el espacio que inunda su presencia

donde sólo cabe estar atentos mientras un pájaro

–que se piensa pequeño–

trina su adiós.

PAVANA POR UNA PRINCESA MUERTA

¿Ya no queda nada?

espera, hay algo

    en la música:

algo como

una ligera grieta

¿en dónde?

atrás

su abertura

en una cicatriz olvidada

¿cómo?

entra la música

     viento de luz

en el camino de regreso

¿a qué?

hacia la noche

después

va yéndose

-siéntelo-

de la pequeña grieta

que se cierra.

PEQUEÑO RELÁMPAGO

Un momento atrás

bajo flores guinda

vibraba su aleteo            

ellos lo miraron en el fulgor

de aparecer entre hojas

del árbol pata de vaca

lució un instante

al despuntar el día

preparaban café

cuando de pronto

en el cristal

un golpe

(no de piedra ni de puño)

amortiguado por el plumaje

tornasol

cayó

palpitó unos segundos

quedó inerte

diminuto colibrí

que horas más tarde

ella recibió entre sus manos

“puedes dejarlo en el altar”

dijo él

al entregárselo: “sólo se secará”

pasaron días: cómo no pensar

en el pequeño relámpago

su viveza había iluminado el aire

luego chocó contra el cristal

observa ahora su ser yacente:

verde azul desde la cabeza

al abdomen

resplandor anaranjado

del cuello que brilla

y se enciende al rotar

largo pico: aguja que bordó

encajes invisibles

patas de garras minúsculas

pecho pelado en el centro

rodeado por fino plumaje blanco

alas grises     diseño

para una rapidez

a mil por hora

y en las cavidades vacías

donde hubo ojos

la evidencia de la maravilla

después de la velocidad.

ÁRBOLES
(DE AGUACATE)

Dirías que son uno

por la ligereza en común

de subir hacia lo alto

y extenderse

en curvaturas

sensuales

y sexuales

llenos de hojas

enlazados los troncos

cual hijos de una

sola semilla

que se hubiese

bifurcado en un ser

de dos cuerpos

que se gozan

ricos en brotes

Dirías que son dos

pero imposible afirmarlo

a la primera

viendo el armonioso

enlace que culmina

en las frondas

paralelas

confundidas

en una

Podrías atenerte

a la contundencia

de los frutos

tan distintos siendo

de la misma especie:

unos redondos

y pesados como

bombas

de corteza dura

y áspera

los otros alargados

con tendencia a

acinturarse

de piel esbelta

fácil al cuchillo

mas no dices nada

ante dos que han

decidido ser

para efectos

visuales y vitales

uno solo

frente al viento

el sol los pájaros

las plagas la lluvia

las sombras y la noche

que les cae encima

al unísono

oscureciéndolos

pacíficamente

en el hogar que custodian

con su ayuntada

arborescencia.

GIRASOLES

Zumban insectos en medio

de un campo de girasoles

algún animal

posiblemente una rata

se apresura ante su peso

cuando cae con suavidad

sobre las altas hierbas

no la encuentran:

con los brazos abiertos

de cara al cielo

en lo profundo del terreno

ha tendido su cuerpo de niña

cierra los ojos para absorber

la plenitud del sol

no demasiado lejos

sobre la banqueta

escucha pasos

correría de gente

voces que juegan

lote baldío

oloroso a humedad

a revoltijo de hojas

y basura:

de cara negra

rodela amarilla

tallos largos y peludos

los girasoles cercan

con lealtad infranqueable

el solaz de su refugio.

CUCHILLO

In figure de colomb volat al ciel.

El canto de un pájaro

su pico

    puro gorjeo

rasga

la penumbra del alba

sólo un pájaro

     -sin verlo

es uno

      ¿sabes? –

cortando

delicadamente

la noche

canto /rasguño

al velo de la oscuridad

empujada con suavidad

por la luz

algo adentro

se rasga también:

entra el canto al centro

del cuerpo

lo atraviesa

le hiere

deshaciéndolo

en luzombra.

Tomado de https://morfemacero.com/