La historia del sorprendente hallazgo de la Coatlicue monumental en 1790

Sin lugar a dudas, la Coatlicue monumental hallada en lo que hoy es el Zócalo de la Ciudad de México, a finales del siglo XVIII, es una obra impresionante; tiene una altura de casi cuatro metros, más de un metro de ancho y pesa casi tres toneladas.

Te contamos cómo sobrevivió el paso del tiempo y llegó a la Sala Mexica del Museo Nacional de Antropología, donde es uno de los monumentos más admirados.

La Coatlicue monumental se ubica en el Museo Nacional de Antropología Foto: Wikipedia

La Coatlicue monumental, madre de Huitzilopochtli

Para contar esta historia hay que regresar en el tiempo, al siglo XVI, cuando los mexicas son conquistados y es destruida Tenochtitlán con sus templos y deidades; pues según los españoles, todas las expresiones religiosas de los pueblos originarios eran obra del demonio.

En consecuencia, muchos monumentos fueron destruidos y otros, desmontados, trasladados a otros lugares y sepultados. Y este fue el destino de la gran Coatlicue, descubierta el 13 de agosto de 1790 en lo que hoy es el Zócalo de la capital del país.

La diosa Coatlicue tiene simbolismos complejos Foto: Museo Nacional de Antropología

Asimismo, la escultura se trasladó al patio de la Real y Pontificia Universidad de México, luego a la Galería de Monolitos de lo que fue el Museo Nacional, para finalmente arribar al Museo Nacional de Antropología.

La probable ubicación del monolito

Gracias al trabajo de los arqueólogos, podemos suponer que la Coatlicue formó parte de la plataforma del Templo Mayor de Tenochtitlán.

Lo anterior debido a la crónica que dejó Andrés de Tapia, uno de los soldados de Cortés, quien describió a detalle el aspecto de dicho templo y dónde se encontraba el monolito de la diosa. De igual forma, de acuerdo a De Tapia, el monumento estaba recubierto de nácar, joyas de oro así como de turquesas, esmeraldas y amatistas.

Sin embargo, sería hasta 1978 cuando se establecería que la crónica del soldado español se refería nada más y nada menos que al monolito de la deidad mexica.

Como capital del Imperio mexica, Tenochtitlán fue una ciudad espléndida Imagen: Wikipedia

Simbolismo de la Coatlicue monumental

Por último, la escultura representa a la diosa Coatlicue, madre de Huitzilopochtli, el dios patrono de los mexicas, quien se encuentra decapitada y parcialmente desmembrada. Se cree que en su momento, cumplió el propósito de dar un mensaje del poderío no solo terrenal de los mexicas, sino también espiritual.

Finalmente, hay que señalar que en el lugar del hallazgo se grabó una placa conmemorativa.

La placa se encuentra entre Pino Suárez y Corregidora Foto: Carlos Tomasini
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