Conversatorios mineros | Mediar entre vecinos

Tomado de https://www.elsoldehermosillo.com.mx/rss.xml#ExpresionSonoraNoticias#Sonora#Hermosillo#RedesSociales#ESN

Todos tenemos experiencia con vecinos molestos, pero cuando tu vecino es una empresa minera con cientos de empleados, tránsito pesado, generación de polvos, ruido y es responsable de un cambio drástico no sólo en el paisaje, sino en la dinámica social de un pueblo, los beneficios que ese vecino debe llevar a tu vida deberán ser suficientemente grandes, para de que no lo etiquetes como un vecino incómodo.

El contexto lo pone la siguiente nota. Autoridades y vecinos del ejido El Bajío de Caborca, Sonora, fueron hasta Londres, Inglaterra, a manifestarse en la reunión anual de accionistas de minera Penmont, reclamando un usufructo indebido, fuera de la ley, y entre otras demandas exigieron la restitución de 436 millones de dólares, producto del mineral extraído, dicen, de forma irregular en sus tierras, entre 1994 y 2013.

Aquí hay mucho para el comentario, un montón, sólo así por encimita da curiosidad saber de dónde sacan los ejidatarios recursos para llevar a un nutrido grupo de vecinos de Caborca a Londres. ¿Quién los financia y por qué?, podríamos pensar en una firma de abogados, un grupo político o empresarial con ánimos de hincarle el diente a parte de esos 436 millones de dólares que reclama el ejido, pero más allá de la especulación este tipo de movilizaciones siempre tienen un orquestador detrás. Otro punto que es interesantes es que en este sexenio la autoridad ha mantenido esta postura antiminera en sus políticas de entrega de permisos y trámites, sin embargo, en este caso particular no se ha movido ni un dedo para destrabar los pleitos agrarios en los que aparentemente el ejido ha obtenido sentencias favorables. En lo que a la indemnización millonaria esa que piden suena complicado, pues aunque la minera, efectivamente hubiera sacado el oro sin permiso alguno, lo cual pareciera complicadísimo, el oro no era del ejido, sino del Gobierno federal es decir de la Nación, pues los minerales no son propiedad del dueño de una superficie, sino del dueño del subsuelo.

Ahora, en La Herradura, es importantísimo decir que no es un pleito entre dos partes, pues, efectivamente hay un tema entre Ejido y Minera y literalmente en medio, justo en la franja que hace frontera entre ejido y mina, se encuentra el crimen organizado, minando, así, por raro que suene, hay grupos delincuenciales asentados en la zona con personal haciendo minería de placer, como se le llama también a la tarea de gambusino, sacando oro desde hace años, sin esconderse y con el conocimiento de todos los actores de la zona, incluyendo a la autoridad, que vale decir, en este sexenio no se le ve muy animada a enfrentarlos.

Al final debemos decir que ser vecino de una mina en lo económico trae muchos más beneficios que perjuicios, debemos recalcar que la decisión de ser vecinos de la mina, no es decisión de la empresa minera, ni del Gobierno, sino en el caso de tierras de un ejido, únicamente es la Asamblea Ejidal la que puede aceptar que la mina se instale en la zona, de ahí la importancia de que los núcleos ejidales estén bien asesorados y sepan negociar las condiciones más justas para su gente y bienestar de su pueblo, después de eso siempre habrá pleitos entre vecinos, lo malo es que hoy en día el vacío de autoridad hace que estas situaciones se recrudezcan y terminen de la peor manera.

Tomado de https://www.elsoldehermosillo.com.mx/rss.xml

#ExpresionSonoraNoticias

#Sonora

#Hermosillo

#RedesSociales

#ESN