El artista, que ahora pinta su dormitorio y la fachada de la Comunidad de Madrid, cree que «consumimos demasiado, ensuciamos demasiado, matamos demasiado». Sobre la polémica de sus puertas para la catedral de Burgos : «La gente tiene derecho a decir lo que piensa, otra cosa es que lo que diga sea interesante o cierto»
#ExpresionSonoraNoticias Tomado de http://estaticos.elmundo.es/elmundo/rss/cultura
Más historias
Ecuador: el oro o el agua, la guerra por Kimsacocha
¡Ni perdón, ni olvido!: la herida de la represión en Xochimilco sigue abierta
Thomas Mann y la libertad