En mi primera clase de antropología, aprendí que el estudio de la antropología consiste en comprender el comportamiento humano y las sociedades. No fue hasta que empecé a estudiar antropología que me di cuenta de lo mucho que desconocía de mí mismo y del mundo que me rodea.
Aquí hay seis cosas que aprendí sobre mí mismo cuando empecé a estudiar antropología:
1. Soy un producto de mi cultura.
Soy más que mi cultura, un individuo único con mi propio conjunto de habilidades, valores y creencias. Aunque mi cultura es una parte importante de lo que soy, es sólo un aspecto de mi identidad. También soy miembro de mi comunidad, mi familia y mis redes profesionales. Cada uno de estos grupos ha conformado quién soy y cómo veo el mundo.
Aunque mi cultura es una parte importante de lo que soy, es sólo un aspecto de mi identidad. También soy miembro de mi comunidad, mi familia y mis redes profesionales. Cada uno de estos grupos
2. Mi visión del mundo está formada por mi cultura.
Mi visión del mundo está formada por mi cultura, lo que significa que veo el mundo a través de la lente de mis valores y creencias culturales. Esto no quiere decir que mi visión del mundo esté totalmente influida por mi cultura, sino que es uno de los muchos factores que contribuyen a mi perspectiva general. Otros factores son mis experiencias personales, mi educación y mis relaciones. Sin embargo, mi cultura es, sin duda, una fuerza importante en mi visión del mundo.
3. Tengo sesgos y prejuicios de los que no soy consciente.
Me bombardean constantemente con mensajes que me llevan a creer ciertas cosas sobre las personas que son diferentes a mí. Puede que ni siquiera me dé cuenta de que lo estoy haciendo, pero sucede. No puedo evitarlo. Es la forma en que funciona mi cerebro.
Puede que no sea consciente de cómo mis palabras y acciones afectan a los demás. Estoy aprendiendo y creciendo constantemente, y me comprometo a ser más consciente de mis propios sesgos y prejuicios.
4. Soy capaz de comprender y empatizar con personas que son diferentes a mí.
Puedo ver de dónde vienen y puedo entender su perspectiva. Puede que no siempre esté de acuerdo con ellos, pero puedo ver su punto de vista. Creo que esta capacidad de empatizar con los demás es una de las cualidades más importantes que puede tener una persona.
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Esto es algo que siempre he podido hacer, y me ha ayudado enormemente en mi vida personal y profesional. Soy capaz de ver los dos lados de cada asunto y puedo ponerme fácilmente en el lugar de otras personas. Esto me permite establecer relaciones sólidas con los demás, y me ha ayudado enormemente en mi carrera.
5. Formo parte de una comunidad global.
Formo parte de una comunidad global de más de 7.000 millones de personas. Eso es mucha gente. Y, sin embargo, a menudo me siento solo en este gran mundo.
Venimos de todos los rincones del planeta y trabajamos juntos para marcar la diferencia. Ya sea ayudando mediante acciones locales u organizando esfuerzos de ayuda internacional, siempre debemos de estar trabajando para tener un impacto positivo.
6. Tengo la responsabilidad de utilizar mis conocimientos para mejorar en medida de lo posible la sociedad.
Esto es algo que me tomo muy en serio, y trabajo duro cada día para tener un impacto positivo. Puedo hacerlo trabajando duro para hacer cambios positivos en mi comunidad, y compartiendo mis conocimientos con otros para que puedan hacer lo mismo. No siempre es fácil, pero es un trabajo importante del que me siento orgulloso.
Tomado de http://Notaantrpologica.com/
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