septiembre 14, 2025

Si sobreproteges y no sabes decir NO, haces daño a tus hijos


Los niños deben saber que el cariño y la felicidad no se demuestran con cosas materiales, dependen de las relaciones entre las personas y el modo en que resuelvan sus problemas

Los padres desean lo mejor para sus hijos, pero eso no significa consentirlos en exceso y cuidarlos demasiado para que nada les pase. Quererlos no es cumplir todos sus caprichos y evitar que asuman las consecuencias de sus acciones o tenerlos en una burbuja para evitarles cualquier peligro.

Ese no es verdadero amor de padres y lejos de beneficiar a sus hijos, los convierte en niños tiranos y en adultos emocionalmente inestables que no serán capaces de relacionarse con los demás, ni con su entorno.

Hay que aprender a decir que no


Los niños tiranos son aquellos que saben cómo manipular a sus padres, hermanos o maestros para obtener lo que quieren. Muchas veces utilizan la rabieta, las pataletas o los gritos, para llamar la atención.

Con frecuencia están enojados y son agresivos. Piensan que todo es de su propiedad y continuamente demandan la atención de sus padres. No toleran que les digan “no” cuando piden algo. No reconocen ninguna figura de autoridad, ni en su casa ni en la escuela y casi siempre se niegan a aceptar las reglas que les imponen

Los padres deben guiar a sus pequeños para que aprendan por sí mismos. Dejarlos que intenten hacer las cosas sin ayuda. Darles opciones, en lugar de resolverles todo. Impulsarlos a que usen su imaginación y recompensarlos cuando algo les sale bien.

El amor y la atención no es conceder todo lo que quieren los hijos. Cuidarlos es ofrecerles las herramientas necesarias para que se valgan por si mismos sin sobreprotegerlos

Poner límites a los niños los vuelve conscientes del entorno

Los límites son parte de una buena educación y son importantes para el desarrollo emocional de los niños. Poner normas desde la infancia con tareas y obligaciones sencillas acordes a la edad del pequeño, fomentan su autonomía y responsabilidad y se traducen en conductas sociales adecuadas.

Educar con límites no significa que los padres impongan las normas autoritariamente a sus hijos como en un régimen militar, sino que compartan con ellos por qué tienen que seguir las reglas y fomentar que ellos reflexionen sobre las consecuencias de sus actos y busquen soluciones para reparar lo que han hecho mal.

Es un regalo para toda la vida

Ser un buen padre o una buena madre no es sencillo, implica mucha paciencia, tolerancia y amor hacia los lindos angelitos de la casa, por eso compartimos algunas reglas que ayudan a tener una relación armónica con ellos y a formarlos para que cuando sean adultos tengan más herramientas para la vida.

· Deja que tu hijo intente hacer las cosas solito.
· Hazle saber que es normal cometer errores.
· Enséñale que sus acciones tienen consecuencias.
· Ponle límites y explícale porqué es importante respetarlos.
· Fomenta la disciplina.

Un niño que aprende a crecer desarrollando sus habilidades y siendo consciente de las necesidades de los otros será más responsable y podrá vivir una vida más plena.

Si quieres saber cómo viajar más síguenos:

Te recomendamos leer:



Comments

comments

Tomado de https://viajeropeligro.com/