Senadores republicanos podrían descarrilar por completo el megaproyecto de ley de Trump

La Cámara de Representantes aprobó el proyecto de ley «One Big Beautiful Bill Act», el ambicioso paquete de políticas domésticas del presidente Trump, según líneas partidistas en la madrugada del jueves. El proyecto de ley, una importante victoria legislativa para Trump y el presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, ahora enfrenta un camino significativamente más desafiante en el Senado. Si bien el proceso de reconciliación presupuestaria evita una obstrucción, requiriendo solo una mayoría simple, las divisiones internas dentro del caucus republicano del Senado amenazan su aprobación.

El líder de la mayoría del Senado, John Thune, reconoce la necesidad de cambios sustanciales. El senador John Hoeven (R-ND) confirmó que las negociaciones con la Cámara de Representantes están en curso, pero se esperan alteraciones significativas. Estos desacuerdos internos destacan conflictos clave: el senador Josh Hawley (R-MO) se opone a los recortes de Medicaid, mientras que las senadoras Lisa Murkowski (R-AK) y otras están luchando para preservar los créditos fiscales de energía limpia, ambos incluidos en el proyecto de ley de la Cámara, implementados más rápidamente que en versiones anteriores. Estas concesiones fueron hechas por los líderes republicanos de la Cámara para apaciguar a los inconformes conservadores que exigían recortes de gastos más profundos. Esto podría llevar a algunos republicanos a apoyar las enmiendas demócratas para mitigar el impacto de estos cambios.

Por el contrario, los senadores Rand Paul (R-KY) y Ron Johnson (R-WI) creen que el proyecto de ley no recorta lo suficiente el gasto. Paul criticó la incapacidad del proyecto de ley para abordar el déficit, mientras que Johnson destacó las diferentes presiones políticas sobre los republicanos de la Cámara y el Senado, señalando las próximas elecciones de la Cámara. Si bien toda la Cámara enfrenta la reelección el próximo año, solo un pequeño número de senadores republicanos se presentan a la reelección, lo que disminuye la presión sobre ellos.

Para complicar aún más las cosas, se incluyen disposiciones no presupuestarias en el proyecto de ley de la Cámara, como la prohibición de la regulación estatal de la IA. Estas violan la «regla Byrd» del Senado y deben eliminarse antes de la aprobación. El senador Thune declaró que las comisiones del Senado están trabajando para identificar estos problemas de manera proactiva. En lugar de enmendar el proyecto de ley de la Cámara directamente, el Senado planea redactar su propia versión, con el objetivo de una aprobación final para el 4 de julio. Esto requiere no solo resolver los desacuerdos del Senado, sino también asegurar la aprobación de la Cámara de cualquier legislación revisada.

Si bien la aprobación de último minuto de la Cámara demuestra la posibilidad de superar los obstáculos, los numerosos desacuerdos y la necesidad de conciliar el proyecto de ley entre la Cámara y el Senado, junto con el inminente plazo límite para el techo de la deuda, hacen que la aprobación oportuna del proyecto de ley sea incierta. Las próximas siete semanas serán cruciales para determinar si la agenda del presidente Trump se convierte en ley.

Tomado de https://feeds.nbcnews.com/msnbc/public/news