Recursos energéticos, trasfondo de la guerra de Israel contra Irán

Recursos energéticos, trasfondo de la guerra de Israel contra Irán

Tomado de https://contralinea.com.mx/feed/

Para el complejo militar y el capital financiero e industrial, “vale la pena” declarar la guerra a Irán, como lo hizo Israel desde el pasado 13 de junio. El trasfondo implica no sólo la lucha por el control de Medio Oriente, sino también por los recursos energéticos y minerales iraníes: esa nación es el tercer productor de gas natural seco, el séptimo productor de petróleo, posee la sexta mayor reserva de zinc, la séptima de cobre, novena de hierro, la quinta de yeso y barita. También cuenta con uranio, oro, plomo y tierras raras, y es el séptimo país con reservas de litio. Todos esos recursos son altamente codiciados por las potencias que respaldan al gobierno de Netanyahu –quien ha acusado a Irán de estar a punto de tener armas nucleares desde 1992–, y por ello también se explica la despedida anticipada del presidente Trump de la cumbre del G7

El 13 de junio, dos días antes de que comenzara la cumbre del G7 en Canadá, Israel atacó Irán bajo una supuesta “defensa preventiva”. Desde entonces hay un intercambio de misiles y ataques que han puesto al mundo al borde de una guerra con proporciones nucleares. Como en el caso de Ucrania, hay un interés geopolítico en Medio Oriente y particularmente sobre Irán, país que ha logrado poder militar en la región y es uno de los países declarados como “amenaza a la seguridad nacional” por parte de Estados Unidos.

Frente a este nuevo escenario de guerra en Medio Oriente, complejo de por sí por el genocidio sobre la población palestina, el G7 aprobó una declaración en la que afirman que “Israel tiene derecho a defenderse” y que “Irán es la principal fuente de inestabilidad y terrorismo regional”. Por otro lado, afirmaron que debe haber una “distensión de las hostilidades en Oriente Medio, incluido un alto el fuego en Gaza”.[1]

A ello se suma que Irán es parte ya de los países que se unieron a los BRICS, junto con Egipto, Etiopia, Emirato Árabes Unidos, Arabia Saudita e Indonesia.

Como se mencionó en otra investigación, hay una serie de estrategias de Estados Unidos que plantean la existencia de un “muro de hierro” en el Atlántico y una estrategia de largo plazo de reposicionamiento hegemónico centrado en la energía. En ese sentido, Irán es una pieza importante. Estados Unidos en su calidad de aún hegemónico, tiene la capacidad de despliegue militar territorial y marítimo y, en última instancia, el ejercicio del unilateralismo agresivo.

Irán “vale la pena” para el complejo militar y el capital financiero e industrial: fue el tercer productor de gas natural seco en 2022 debajo de Estados Unidos y Rusia; el séptimo productor de petróleo; es el segundo país en reservas de gas, y el cuarto en reservas de petróleo. Tan importante fue que Donald Trump dejó la cumbre del G7, y canceló reuniones para atender el escenario de guerra en Medio Oriente.

Adicionalmente, en términos de minerales estratégicos, Irán posee la sexta mayor reserva de zinc, la séptima de cobre, novena de hierro, la quinta de yeso y barita. El 3 por ciento de plomo y zinc, enormes reservas de carbón. Posee uranio, oro, plomo y la joya de la corona: tierras raras. Es el séptimo país con las reservas de litio en el mundo.[2] De hecho, en 2023 anunciaron la existencia de 8.3 millones de toneladas de litio en Hamedan. En abril de 2025, Irán y Bolivia, país que posee las mayores reservas de litio en el mundo, anunciaron negociaciones para exploración y explotación de tierras raras.

FOTO: 123RF

Los datos no son menores: en 2019, Bolivia padeció un golpe de Estado y detrás de éste estuvo la disputa internacional por el litio. Perú fue otro país con golpe de Estado en 2022 contra Pedro Castillo, y los minerales estratégicos fueron la razón de ese golpe. Argentina, otro país importante con reservas de litio, ha continuado la compra-venta del país con Milei. Ahora Irán. La disputa por recursos estratégicos está en el primer orden de importancia mundial.

México afortunadamente entró en un proceso de recuperación del sector energético y minero, con la creación de la empresa LitioMx y la declaratoria del litio y otros minerales como estratégicos, la recuperación soberana de Pemex y CFE, con una nueva Ley Minera y, recientemente con la firma por parte de la Secretaría de Economía del Primer Comité Educativo de Minería México 2025 en el que su titular, Marcelo Ebrard, mencionó “Nuestra obligación como autoridades es estar preparados no ser reactivos, sino propositivos, prevenir, ver qué tenemos que hacer para que nuestro país salga avante, por un lado, para que aproveche las oportunidades que hay y por otro, para que no tengamos vulnerabilidades en cuanto a minerales”.[3]

Como mencionó el Instituto Internacional de Estudios para la Paz de Estocolmo (SIPRI), el gasto militar mundial ascendió a 2 mil 718 millones de dólares en 2024; ello implicó un aumento del 37 por ciento entre 2015 y 2024. El aumento interanual de 2024 frente a 2023 fue del 9.4 por ciento, el mayor desde 1988; otro dato relevante es que el gasto militar como porcentaje del PIB mundial fue de 2.5 por ciento.[4]

Los primeros 10 países con el mayor gasto militar son: Estados Unidos, China, Rusia, Alemania, India, Reino Unido, Arabia Saudita, Ucrania, Francia Japón. Precisamente los países miembros del G7 y varios de los BRICS. Irán se encuentra en el lugar 34. Desde luego, el gasto militar estadunidense no tiene parangón, equivale al 37 por ciento del total mundial; le sigue China con 12 por ciento, y Rusia con el 5.5 por ciento.

En comparación, los países de los BRICS+ representan apenas el 70 por ciento del gasto militar de Estado Unidos. Como se muestra en la gráfica siguiente, el gasto militar del G7 es superior al de los BRICS+:

Fuente: elaboración propia con datos del SIPRI, Military Expediture Database, 2024

Por otra parte, el PIB del G7 y de los BRICS+, medido en paridad de poder adquisitivo (PPA) es mayor en los países de los BRICS+ a partir de 2020, justo en la pandemia y en 2023, según datos del Banco Mundial, ya rebasa a los países miembros del G7.

Fuente: elaboración propia con datos del Banco Mundial

Reunión del G7

El G7 reúne a las principales siete economías occidentales del mundo desde 1975, década marcada por una crisis múltiple: económica, energética y climática. Ayer como hoy, de nuevo estamos frente a una crisis económica en curso tras la pandemia y la crisis climática es cada vez más grave. Frente a la destrucción de la biota mundial distintas instancias multilaterales como la ONU, OCDE, CEPAL, entre otras, adoptaron una serie de medidas para mitigar el colapso climático.

De los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 sólo está en vías de cumplirse el 16 por ciento y la mitad muestra un progreso mínimo o moderado.[5] A cinco años de 2030 es claro que poco se cumplió y que el mundo sigue aumentando su consumo energético alentado primordialmente por el modelo económico capitalista de producción y, particularmente, para mantener el complejo militar industrial que no da signos de parar de producir.

Entre el 15 y el 17 de junio se llevó a cabo la reunión el G7 en Kananaskis, Canadá. Además de los miembros del G7 –Alemania, Canadá, Francia, Italia, Japón, Reino Unido y Estados Unidos–, participaron países invitados, como México, Australia, Brasil, India, Sudáfrica, República de Corea y Ucrania; así como la Organización del Tratado del Atlántico Norte Naciones Unidas (OTAN) y el Banco Mundial.

Las principales líneas que se abordaron fueron: 1) Protegiendo nuestras comunidades y el mundo; 2) Construyendo seguridad energética y acelerando la transición digital; 3) Fortalecer las cadenas de suministro de minerales críticos; 4) Impulsar la adopción de la IA en los sectores público y privado; 5) Desbloquear todo el potencial de la tecnología cuántica para impulsar el crecimiento de nuestras economías.

Previo a esta cumbre de junio, en la reunión de Ministros de finanzas y gobernadores de Bancos Centrales –que se realizó en mayo de 2025– se hizo un llamado para combatir la delincuencia financiera, incluyendo “el blanqueo de capitales y el financiamiento al terrorismo”. Para ello, Canadá anunció 4.8 millones de dólares en asistencia técnica.

FOTO: 123RF

Asegurar cadenas de suministro y minerales críticos

Uno de los grandes proyectos del G7 es la Alianza para la Mejora de las Cadenas de Suministro Resilientes e Inclusivas (RISE), liderada por el Banco Mundial. Canadá también aportará 20 millones de dólares para esta estrategia, que incluye a América Latina y el Caribe.[6]

Además de esta estrategia, el G7 también apoyará el Foro Intergubernamental sobre Minería, Minerales, Metales y Desarrollo Sostenible. El Plan de Acción sobre minerales críticos incluye anticiparse a la escasez de minerales críticos y coordinar respuestas, diversificar y relocalizar la minería, procesamiento, fabricación y reciclaje. Promover una “hoja de ruta” para mercados abiertos, aumentar la inversión privada a gran escala –con apoyo de la banca de desarrollo multilateral y prestamistas privados– y superar obstáculos administrativos en países productores.

Resolución de apoyo a Ucrania

Por último, respecto a Ucrania, no hubo una declaración conjunta por la negativa de Estados Unidos. Sin embargo, Canadá aportará 1 mil 470 millones de dólares en nueva ayuda militar para drones y vehículos blindados, así como sanciones a personas, entidades y buques que sigan apoyando a Rusia en la guerra con Ucrania.[7]

También Canadá hizo anuncios de financiamiento para el fortalecimiento de economías, eufemismo usado para decir que van a invertir otros países y regiones como América Latina.

Anuncios de Canadá en el G7

Apoyo a Ucrania2 mil millones de dólares adicionales en asistencia militar este año
Préstamo de 2 mil 300 millones de dólares a Ucrania a través del mecanismo de Préstamos Extraordinarios para la Aceleración de Ingresos del G7
57.4 millones de dólares en asistencia relacionada con la seguridad
Fortalecimiento de economías y sistemas internacionales391.3 millones de dólares para impulsar el capital privado hacia proyectos de crecimiento económico y desarrollo en todo el mundo
Hasta 185.6 millones de dólares para acelerar la adopción y comercialización de inteligencia artificial
120.4 millones de dólares para la prevención, respuesta y recuperación de incendios forestales a nivel mundial
80.3 millones de dólares para construir cadenas de suministro fiables de minerales críticos
22.5 millones de dólares para acelerar el desarrollo y el uso de tecnologías cuánticas.
Hasta 544 millones de dólares en garantías para nuevo financiamiento para el desarrollo en América Latina y el Caribe.

Fuente: elaboración propia con datos del G7

Prevención del tráfico ilícito de migrantes y la guerra por la IA

Dos declaraciones más fueron emitidas por el G7. La conformación de una Coalición del G7 para Prevenir y Combatir el Tráfico Ilícito de Migrantes y el Plan de Acción del G7  para Prevenir y Combatir el Tráfico Ilícito de Migrantes 2024, y por otro lado la Declaración de los líderes del G7 sobre la IA para la prosperidad.

Respecto al combate al tráfico ilícito de la fuerza de trabajo que representan los migrantes destaca un enfoque de confiscación de activos de redes criminales; impulsar la prevención en países de origen y tránsito mediante “fortalecimiento de capacidades de gestión fronteriza”. Lo que más llama la atención es que la declaración incluye la colaboración con operadores de transporte para prevenir la facilitación de migración irregular “incluyendo el uso de migrantes como arma para socavar la estabilidad o como táctica de guerra híbrida”.

FOTO: 123RF

Respecto a la IA, mencionaron en el G7 que pretenden impulsar la innovación, la “adopción de una IA segura, responsable y confiable que beneficie a las personas, mitigue las externalidades negativas y promueva nuestra seguridad nacional”. De esta forma, como en otros temas, el G7 subordinó el desarrollo científico tecnológico a los intereses de “seguridad nacional”, que en última instancia expresa la subsunción a intereses militares, particularmente de Estados Unidos.

Para lograrlo, el G7 plantea organizar una serie de “laboratorios de soluciones rápidas” para innovaciones de IA en el sector público; la adopción de una red de IA de código abierto para lo miembros y, que los ministros pertinentes en cada país miembro, exploren inversiones estratégicas para acelerar la adopción de la IA en el sector público.

En otras palabras, crear mercado en el sector público de varios países para las empresas que han logrado desarrollar la IA, como Nvidia, que perdió 600 mil millones de dólares en enero de 2025 tras la aparición de Deepseek, la IA china.

[1] https://g7.canada.ca/en/news-and-media/news/g7-leaders-statement-on-recent-developments-between-israel-and-iran/

[2] https://www.middleeastbriefing.com/news/an-overview-of-irans-mining-industry-opportunities/

[3] https://www.gob.mx/se/prensa/apuesta-mexico-por-la-innovacion-minera-secretaria-de-economia-instala-el-primer-comite-educativo-de-mineria-2025?idiom=es

[4] https://www.sipri.org/sites/default/files/2025-04/2504_fs_milex_2024.pdf

[5] https://www.pactomundial.org/noticia/en-que-situacion-se-encuentran-los-ods-de-la-agenda-2030/#:~:text=Sin%20embargo%2C%20el%20progreso%20de,tercio%20est%C3%A1%20estancado%20o%20retrocediendo.

[6] https://g7.canada.ca/assets/ea689367/Attachments/NewItems/pdf/finmm_nr_en.pdf

[7] https://g7.canada.ca/en/news-and-media/news/g7-leaders-statement-on-ai-for-prosperity/

Tomado de https://contralinea.com.mx/feed/