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A menos de dos horas de la Ciudad de México, existe un lugar donde los niños persiguen gallinas, las luciérnagas bailan sobre la hierba y el olor a maguey recién raspado flota en el aire. Se llama Rancho La Mesa y se encuentra en el Estado de México, muy cerca de Tlalmanalco. Es una opción hecha a la medida de familias que no están buscando lujos, sino conexión: entre ellos, con la tierra y hacia el interior.
Entérate de cómo es una escapada al Rancho La Mesa y todo lo que tienes que considerar si estás planeando visitar este lugar.
Un rancho con historia pulquera
Rancho La Mesa no es un complejo turístico que brotó de la nada. Su historia empieza en el siglo XIX, cuando la región era famosa por su producción de pulque. En su mejor época, de estos valles salían hasta 50,000 litros diarios. Aquellos días quedaron atrás, pero el rancho conserva su vocación agavera. A veces puedes ver cómo los tlachiqueros extraen el aguamiel directo del corazón del maguey y probar el pulque fresco que se sirve en temporada.
Los dueños actuales decidieron conservar el espíritu original. Mantuvieron las construcciones antiguas, apostaron por los productos locales y evitaron convertir el lugar en un parque temático más. Y esa decisión se siente.
Qué hacer en Rancho La Mesa
En este lugar no hay espectáculos ruidosos ni actividades en masa. Lo que sí hay: campo abierto, zona de juegos de madera, fogatas, animales de granja, paseos en tractor y panorámicas del Popocatépetl que parecen cuadros al óleo.
Hay gotcha para adolescentes, paseos en cuatrimoto y tirolesa para los más aventureros y una granja didáctica donde los más pequeños pueden alimentar conejos o acariciar borregos. Una de las actividades preferidas por las familias son los paseos a caballo.
Si visitas en junio, podrías vivir el avistamiento de luciérnagas. Si vas en septiembre, te tocarán las expediciones de recolección de hongos. En invierno, los fines de semana pulqueros son una gran excusa para saborear esta tradicional bebida.
También puedes simplemente caminar. El terreno es amplio, lleno de árboles, senderos de terracería y vistas abiertas. Aquí los niños se ensucian las manos, corren sin miedo y vuelven a casa con historias reales.
Hospedaje en Rancho La Mesa
Hay dos opcioens para hospedarte en Rancho La Mesa.
La primera son las cabañas rústicas, para dos, cuatro o seis personas. Si eliges esta opción, no esperes jacuzzi ni pantallas planas. Las cabañas no cuentan con electricidad ni agua caliente. Considera llevar lámparas, cobijas extra, agua potable y cargadores portátiles. El celular tiene señal sólo en ciertos puntos. No hay señal de internet inalámbrica. Para muchas familias, esta desconexión se convierte en el mejor regalo: sin celulares, sin correos, sin redes. Sólo una fogata, una noche estrellada y conversación.
La segunda opción es el Hotel Rancho La Mesa, el cual cuenta con todas las comodidades, incluyendo electricidad, agua caliente y señal de internet inalámbrica.
Cómo llegar a Rancho La Mesa
Rancho La Mesa se encuentra en Santo Tomás Atzingo, municipio de Tlalmanalco. La forma más sencilla de llegar es en automóvil particular. El rancho está sobre la carretera federal México-Cuautla, a la altura del kilómetro 18.5. Desde CDMX, el trayecto suele tomar entre una hora y media y dos horas.
Servicios, seguridad y comida
Dentro del rancho hay estacionamiento, acceso controlado, baños en la casa principal, seguridad privada y un restaurante rústico muy recomendable. El menú incluye pizzas al horno, molcajetes, antojitos típicos, desayunos campiranos y pulque.
Lo que dicen quienes han ido
Las reseñas coinciden en que la experiencia de las cabañas rústicas no es para todos. Si lo que buscas son instalaciones de lujo, te vas a frustrar. Pero si estás dispuesto a dormir sin enchufe y despertarte con el canto de un gallo en lugar de una alarma, es una experiencia que deja huella. Por otro lado, el hotel tiene buenas reseñas que destacan la limpieza y comodidad de las habitaciones.
Los visitantes resaltan la calidez del personal, la comida, la limpieza de los espacios y la paz del entorno. Algunos sugieren llevar bocadillos propios, si vas en grupo, y tener paciencia con el camino de terracería. Pero la mayoría termina diciendo lo mismo: “volveríamos sin dudarlo”.
Información útil para planear tu visita a Rancho La Mesa
- Ubicación: Santo Tomás Atzingo, Tlalmanalco, Estado de México.
- Cómo llegar: carretera México–Cuautla, km 18.5.
- Recomendación: llegar en auto. Llevar linternas, repelente, y actitud de campamento.
- Alojamiento: cabañas rústicas (reserva con anticipación).
- Aceptan mascotas: sí
Rancho La Mesa no es un destino turístico masivo, y eso es justamente su valor. Es un lugar para ensuciarse las botas, para mirar el cielo sin filtro y para recordar que México tiene espacios donde el tiempo todavía se mueve al ritmo del campo.
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Abraham Bojórquez Escritor enamorado del México profundo y ancestral. Explorador, aventurero y cuentacuentos nato.
Tomado de https://www.mexicodesconocido.com.mx/
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