Podríamos decir que el ojo de venado es el amuleto mexicano por excelencia. Se le coloca a los recién nacidos para protegerlos del “mal de ojo”, mientras que los adultos lo usan para enfrentar épocas difíciles o desafíos en las distintas áreas de la vida.
Se la llama ojo de venado por el parecido con dicho órgano de ese animal, aunque su nombre real es semilla de mucuna urens, por ser el nombre de la planta de la cual proviene. No obstante, de acuerdo con la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio), también tiene otros nombres como ojo de toro, ojo de caballo y ojo de buey.
Otros nombres del ojo de venado
Además de Aguacate picoso, casco de burro, chalahuitico de monte, habilla, había, jabilla, jicamilla cimarrona, pica-pica, tecalate, teocoaleche, bejuco e pollo, jicamilla cimarrona y tecalate.
Todo apunta a que el origen del ojo de venado como un amuleto para la buena suerte, ocurrió en Xichú, municipio al noreste del estado de Guanajuato. No obstante otras regiones del país también pudieron haberlo considerado como un objeto de protección, dado que la mucuna también se daba en los estados de Chiapas, Oaxaca, Puebla, San Luís Potosí y Veracruz.
¡Descubre el México Auténtico a través de nuestro podcast!
Iglesia católica contra el ojo de venado
Pero a todo esto ¿realmente funciona? Y la respuesta a esto es un rotundo quién sabe. De hecho tiene sus detractores. Hace uno mucho tiempo
No obstante tiene sus detractores, porque hace no mucho tiempo el padre Eduardo Hayen Cuarón dijo sobre el ojo de venado que es un amuleto y por tanto una práctica esotérica, maligna y “obra de Satanás”, contraria al primer mandamiento de la fe católica (“amarás al señor tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma y con toda tu mente”).
Ojo de venado, canción icónica de Los Caifanes
Sin embargo muchos mexicanos y mexicanas ven en este objeto un amuleto confiable e inofensivo, tanto que, como ya se dijo desde el inicio, hasta se los colocan a los bebés.
De hecho el emblemático grupo de rock mexicano Los Caifanes le compuso una canción a este amuleto mexicano dentro de Caifanes, su disco debut, mismo que vio la luz en 1988. Dicha pieza tal vez sea una de las más enigmáticas de su carrera.
Un tema que habla de la mística, lo sobrenatural, rituales chamánicos y la desesperación humana cuando se ve invadida por fuerzas desconocidas. Cuéntanos tus experiencias usando el ojo de venado.
México Desconocido Conoce México, sus tradiciones y costumbres, pueblos mágicos, zonas arqueológicas, playas y hasta la comida mexicana.
Tomado de https://www.mexicodesconocido.com.mx/
Más historias
La sustancia, o el horror estético del cuerpo | Letras Libres
El decálogo de la nueva Semarnat – Pie de Página
¡Descubre el pambamuerto! La nueva sensación culinaria de la CDMX – México Desconocido