Muere lentamente quien no viaja, quien no lee, quien no encuentra gracia en sí mismo


No midas el éxito en cuanto tienes en la cuenta de banco, mide lo feliz que has sido al vivir tu vida. La vida más allá de una oficina de 9 a 6 de la tarde

Date la oportunidad de dormir en hostales, comer en mercados y dejar todo para viajar.


“Si tienes veintitantos y estás en forma, hambriento por aprender y ser mejor te pido que viajes -tan lejos y tanto como puedas-. Duerme en el piso si tienes que hacerlo. Descubre cómo viven otros. Aprende a comer y cocinar. Aprende de ellos donde quiera que vayas.” Anthony Bourdain

Invierte en experiencias, son para toda la vida

Claro que una experiencia te da felicidad porque a largo plazo lo que terminas es creando una serie de recuerdos de un momento maravilloso que puedes revivir en cualquier instante. Las ganas de seguir logrando tus metas es un sentimiento inmenso que te empodera y te permite creer que si ya lo lograste podrás hacerlo nuevamente.

¿Las cosas materiales nos hacen felices? Sí, pero es efímera. ¿Recuerdas la emoción que te dio comprarte algo que te gusta mucho? ¿Dónde está ahora? Ese sentimiento breve pero efímero es satisfacción, lograste algo que deseabas muchísimo.

Esa “satisfacción” se va borrando y desapareciendo lentamente conforme pasan las semanas. Lo que te hacía vibrar de emoción se verá sustituido por algo que quieras nuevamente.

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¿Y cuándo vas a comenzar a vivir?

Por cada minuto de vida que inviertas en tu trabajo trata de recuperar tiempo con tu familia: ir a pescar, salir a descubrir un pueblo o un museo. Todas esas pequeñas actividades dan más que el dinero, dan pura felicidad y complementan la de otros.

Cuando inviertes tu tiempo en los demás, las personas suelen hacer lo mismo contigo. Y para muchas cosas no requieres dinero, pero sí tiempo de hacerlo.

Si pasas la vida trabajando ¿Cuándo vas a comenzar a vivirla? El tiempo es limitado y la juventud también. Nos enseñan que con la jubilación vamos a tener todo el tiempo necesario para cumplir nuestros sueños ¿Pero en verdad es así?

Viajar puede ser una aventura divertida o una oportunidad de visitar amigos y familiares. Para otros, podría tratarse de salir de las zonas de confort y embarcarse en un nuevo viaje.

Caminar por ciudades que soñaste y no importa si estoy cansada o no; sólo quieres estar ahí y vivir. ¿Quieres probar nuevos sabores, conocer personas diferentes, abrir mi mente a nuevas ideas y dejar una huella en el mundo? Entonces viaja.

Y cuando te pregunten “¿Valió la pena el viaje?” responder con una sonrisa tan grande que nadie podrá equivocarse.

Valdrá la pena

Cuando sales te sientes libre y tendrás una necesidad de repetirlo una y otra vez hasta que esa sensación se vuelva familiar. Cuando sales de viaje estás comprometido contigo mismo y con tus sueños. Puedes elegir donde estar, qué hacer y qué ver. La lista por descubrir se vuelve tan ambiciosa como grande y una de las mejores experiencias te espera para descubrirlo por tu cuenta.

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Tomado de https://viajeropeligro.com/