octubre 18, 2025
Márai, Bodor, Krasznahorkai

Márai, Bodor, Krasznahorkai

“Hay que leer más libros del ganador del Nobel de Literatura de este año. Es también una celebración de la cultura húngara, heredera del Imperio Austro-Húngaro, que a principios del siglo pasado refulgió como uno de los momentos más luminosos de...Tomado de https://morfemacero.com/

El laberinto del mundo

José Antonio Lugo

  1. Hungría

A mediados del milenio pasado, durante siglo y medio, el reino de Hungría estuvo desmembrado en tres partes: la occidental, bajo los Habsburgo; la central, con la ciudad de Buda en poder de Turquía, y la oriental, Transilvania, principado autónomo (hoy Transilvania pertenece a Rumania). Esto nos da una idea de la compleja riqueza cultural de lo que fue la mitad del Imperio Austro-Húngaro. 

Entre los autores húngaros más conocidos están los filósofos Gyorgy Lukács y Arthur Koestler, el novelista Stephen Vizinczey, autor de En brazos de una mujer madura, muy leída en México, e Imre Kertész, ganador del Premio Nobel de Literatura en 2002, cuya obra se inscribe en la “literatura del apocalipsis”. Habría que destacar también a los cineastas István Szabó y Béla Tarr, así como el pintor Brassaï. 

Hoy nos referiremos a los tres escritores más importantes de las últimas décadas. 

  1. Sándor Márai

Después del fin de la Segunda Guerra Mundial, los escritores húngaros tuvieron que elegir entre la sumisión y el exilio. Márai se exilió en los Estados Unidos. Es autor de novelas formidables: El último encuentro, que describe cómo dos viejos amigos que conformaron un triángulo con la esposa de uno de ellos, cuarenta años después se dan cuenta de que ninguno de los dos tuvo las agallas para hacerla feliz; La mujer justa, una novela dividida en tres partes, que describen al hombre pequeño burgués, a su mujer que comparte esos valores y a una campesina arribista. Como en la vida nadie deja de ser quién es, el resultado es desgraciado para los tres. Destaco también La amante de Bolzano, que describe la llegada de Giacomo Casanova a esta ciudad, para encontrarse con un viejo amor y su anciano esposo, donde ella le demuestra a Casanova que es muy bueno para conquistar a cualquier mujer, pero es incapaz de amar. 

  1. Ádám Bodor 

Debo a Héctor Orestes Aguilar, que anduvo dando clases por la zona del Imperio Austro-húngaro, haber leído El distrito de Sinistra, de Ádám Bodor, un escritor que escribe en húngaro pero que nació precisamente en la comunidad húngara de Transilvania.

El personaje Adam Bodor -homónimo del autor- viaja al distrito de Sinistra a la búsqueda de Béla, su hijo adoptivo. Todo es amenazador e irreal. Una combinación de un bosque con niebla y el mundo opresivo de Kafka. Le retiran el pasaporte, no lo dejan moverse ni regresar; nada tiene sentido. Al final de la obra, su hijo accidentalmente se prende fuego: “Le ardieron hasta las uñas, le chisporrotearon la punta de la nariz y las orejas, estallaron sus bolsillos. Aún tuvo tiempo de ver a los curiosos que se congregaron a su alrededor, de comprobar la indiferencia vidriosa de sus miradas”. 

  1. Lázlo Krasznahorkai, Premio Nobel de Literatura 2025

En su discurso al recibir el Premio Formentor, subrayó “el poder transformador de la literatura y su capacidad para reconfigurar el mundo”. Evocó con gratitud las influencias literarias que lo han guiado, mencionando a autores como Franz Kafka, Thomas Pynchon, y Fiódor Dostoyevski, así como a poetas y narradores húngaros como Attila József y Péter Hajnóczy. Destacó que el acto de escribir es, ante todo, un compromiso con la búsqueda de lo inefable. 

He leído Al Norte la montaña, al Sur el lago, al Oeste el camino, al Este el río, cuya trama tiene lugar en el sur de Kioto. El protagonista es el nieto del príncipe Genghi -sí, el de la novela de Murasaki Shikibu y el del cuento de Madame Yourcenar-. “La mirada del príncipe Genji impresionaba, en efecto a quien podía verlo. Era la confirmación en la realidad de que la sensiblidad humana, la solidaridad y la compasión, la discreción y la buena voluntad, el tacto y la humildad, la excelsitud y la vocación para grandes metas poseían un mundo en la tierra”. 

  1. Los premios Nobel de literatura.

Están los que no ganaron: Tolstoi, Kafka, Pessoa, Musil, Proust, Musil, Joyce, Nabokov, Yourcenar, Durrell, Borges, Dinesen…

Están los que sí y lo merecían, como Thomas Mann, por citar sólo uno. Están los que “ni fu ni fa” y ni los mencionaremos.

El premio sirve para celebrar a quien lo merece y todo mundo conoce (Gabo, Vargas Llosa) o para difundir a estupendos escritores (Tocarczuk, Kraznahorkai, Fosse) que sin el premio no serían traducidos a muchos idiomas -o lo harían más lentamente-.

Hay que leer más libros del ganador de este año. Es en primer término un premio personal. Es también una celebración de la cultura húngara, heredera del Imperio Austro-húngaro, que a principios del siglo pasado refulgió como uno de los momentos más luminosos de la cultura occidental. 

Tomado de https://morfemacero.com/