La líder opositora venezolana se dirige a la capital de Noruega tras las declaraciones del fiscal general de Venezuela, quien la consideraría «fugitiva».
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María Corina Machado confirmó ayer su asistencia a la ceremonia del Premio Nobel de la Paz en Oslo, según lo informado por el Instituto Nobel a RFI. Sin embargo, no se han proporcionado detalles sobre cómo se llevará a cabo su traslado, dado el contexto de seguridad complicado en el que se encuentra y su situación de vida oculta en Venezuela.
Entre los que también han confirmado su presencia en la ceremonia se encuentran el presidente argentino, Javier Milei, y Edmundo González, candidato de la oposición venezolana a la presidencia en 2024.
Machado ha instado a los venezolanos en el extranjero a participar en una marcha este sábado “por la paz y la libertad”, justo antes de la ceremonia del Nobel. En un mensaje en redes sociales, afirmó que, mientras el gobierno de Nicolás Maduro intenta restar importancia a este reconocimiento, las movilizaciones encenderán «una luz por la paz y la libertad de Venezuela» en 80 ciudades de más de 20 países.
El líder del Comité Nobel, Jørgen Watne Frydnes, calificó esta semana el viaje como «peligroso». En declaraciones al canal público ‘NRK’, expresó su esperanza de que se garantice la seguridad de Machado para que pueda llegar a Noruega y regresar a su país. Por su parte, el fiscal general de Venezuela advirtió el 20 de noviembre que Machado sería considerada «fugitiva» si abandonaba el país para recibir su premio.
El Premio coincide con un aumento de las tensiones entre Caracas y Washington
Machado recibió el Premio Nobel el 10 de octubre «por su incansable labor en apoyo de los derechos democráticos del pueblo venezolano y por su lucha por una transición justa y pacífica de la dictadura a la democracia» en Venezuela.
La ceremonia del Premio Nobel se llevará a cabo la próxima semana en Noruega, en un contexto de creciente despliegue militar estadounidense cerca de Venezuela en las últimas semanas y un aumento de las tensiones entre Washington y Caracas.
Estados Unidos sostiene que este despliegue, que comenzó en agosto, es parte de operaciones contra el narcotráfico, mientras que el presidente Nicolás Maduro afirma que el objetivo es derrocarlo y apoderarse de las riquezas del país. Tras recibir el Nobel, Machado dedicó su premio al presidente estadounidense, subrayando que su apoyo es crucial para asegurar una transición democrática en Venezuela.
Tomado de https://www.rfi.fr/
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