febrero 19, 2025

Los neandertales eran inteligentes y enseñaron a los humanos una o dos cosas


En poco más de una década, nuestra comprensión del período reciente de la evolución de los humanos se ha revolucionado. Las nuevas excavaciones y la aplicación de métodos científicos están produciendo conocimientos extraordinarios sobre nuestro pasado antiguo y anulando verdades que antes se sostenían sobre los neandertales.


Tom Higham, profesor de Ciencias Arqueológicas en la Universidad de Oxford, explica los importantes intercambios, tanto culturales como genéticos, entre humanos modernos y los neandertales. Ahora sabemos que hace tan solo 40.000 años puede haber seis o más linajes diferentes de humanos en la Tierra.

Los neandertales, los denisovanos, los “hobbits”, Homo floresiensis, el Homo luzonensis en la isla de Luzón en Filipinas y nosotros (Homo sapiens), por mencionar algunos.

También sabemos que tenemos un legado genético del período durante el cual nos superpusimos con estos primos perdidos. Esta herencia genética podría haber sido una de las claves de cómo nos las arreglamos para tener tanto éxito y extendernos por todo el planeta.

Nuestra especie, el Homo sapiens, evolucionó en África hace unos 300.000 años. Antes de 2010, el pensamiento predominante entre los antropólogos era que esta especie tuvo muy poco o ningún contacto con otros parientes humanos extintos.

Hubo varios movimientos fuera de África, generalmente entre hace 160.000 y 60.000 años, pero los más importantes para nuestra historia fueron los más recientes.

En algunos sitios arqueológicos de Europa existe una brecha entre las últimas capas arqueológicas neandertales y el comienzo de las capas posteriores que contienen evidencia de los primeros humanos, Homo sapiens. Esto sugirió que quizás en estas regiones los dos grupos tal vez ni siquiera se hayan conocido.



Humanos y neandertales: coexistencia e intercambio genético.

En 2010, científicos de Leipzig, Alemania, anunciaron que habían secuenciado la mayor parte del genoma neandertal. El análisis mostró que los seres humanos heredan una pequeña cantidad de ADN de neandertales y que, de hecho, se han cruzado nuestros dos grupos.

Esto fue una gran sorpresa para muchos en ese momento, se sugirió que los dos grupos pueden haberse reunido brevemente. Se sugieren lugares del Cercano Oriente, con humanos que posteriormente llevaron niveles bajos pero similares de ascendencia genética de los neandertales a todas partes del mundo.

Unos años más tarde, en 2014, el grupo de investigación de Tom Higham en Oxford hicieron un descubrimiento relevante. En Europa, los neandertales y el Homo sapiens se habían superpuesto entre sí durante un tiempo considerable.

Se estima un periodo de 5.000 años, antes de que los neandertales desaparecieran hace unos 40.000 años. La desaparición de los neandertales fue, por tanto, un proceso más largo y prolongado de lo que se pensaba.

Parece que entre 45.000 y 40.000 años atrás éramos contemporáneos y teníamos mucho tiempo para reunirnos e interactuar. Dada esta coexistencia y el intercambio genético que se produjo, ¿pudo haber también intercambio cultural entre los dos grupos? Muchos paleoantropólogos pensaron durante décadas que si había intercambio cultural.

Es probable que se haya dado de una sola manera: del Homo sapiens supuestamente superior a los neandertales menos capaces.

En investigaciones recientes sobre los neandertales se ha demostrado que, lejos de eran un grupo sumamente capaz. Hay evidencia de que eran un grupo sofisticado de cazadores-recolectores, habitaron durante más de 250.000 años y sobrevivieron a la variabilidad significativa en el clima. Esta evidencia sugiere que antes de la llegada de los humanos modernos, estaban haciendo cosas que se consideraban de dominio exclusivo del Homo sapiens.


Sobre la conducta moderna y antigua en Eurasia.

Este es un momento en que los neandertales eran los únicos ocupantes de Europa. Los arqueólogos asumieron durante décadas que todo el arte antiguo dibujado en las paredes de las cuevas fue producido por humanos modernos. Estos nuevos resultados desafían esa visión.

Una nueva evidencia fascinante, por ejemplo, sugiere ahora que los neandertales podrían haber sido los primeros pintores rupestres de Europa. Podemos fechar pequeñas concreciones de carbonato de calcio que han crecido lentamente sobre superficies pintadas utilizando trazas de isótopos radiactivos de uranio. Se han obtenido edades extremadamente antiguas, lo que demuestra que algunas de las cuevas pintadas en España tienen más de 65.000 años.

De manera similar, también estamos comenzando a reconocer evidencia de que los neandertales se comportan “conductualmente modernos”. Quizás vistiendo adornos hechos con garras de águila, adornándose ellos mismos con plumas, usando colorantes minerales y probablemente usando ropa seleccionada deliberadamente.

Cada vez más, vemos evidencia de contacto periódico entre estos diversos grupos y de mestizaje entre humanos y otros. En un trabajo publicado en abril de 2021 demuestran que los genomas de los primeros humanos modernos en Eurasia a menudo contienen ADN neandertal.

Esto indica que el mestizaje entre los dos grupos ocurrió a veces solo unas pocas generaciones antes de que esa persona viviera. El ADN no se dividió posteriormente en bloques más pequeños con las generaciones sucesivas modernas solo para humanos.

Se están acumulando pruebas que muestran que las variantes genéticas que hemos heredado de estos antiguos vínculos entre especies tienen importantes implicaciones para nosotros hoy. Hay algunos que son positivos: sin el ADN denisovano, los tibetanos no podrían vivir en la altura. Otros son menos positivos: variantes genéticas que codifican para diabetes tipo II, lupus y tabaquismo. Como dato curioso la adicción a algo proviene del ADN de los neandertales.


“Hibridación” y beneficios genéticos.

Ahora es más evidente que la “hibridación” entre diferentes grupos humanos fue crucial a medida de que nuestros antepasados ​​se trasladaron a entornos nuevos. A través de la hibridación, pudimos obtener algunos beneficios genéticos rápidos de los linajes humanos que habían estado ocupando estas regiones durante milenios antes.

Estos beneficios, junto con otras adaptaciones conductuales y tecnológicas ayudaron al Homo sapiens a convertirse en una “especie invasora” de gran éxito. ¿Fue así que se trasladó a todas partes del planeta y se adaptó a la vida allí.

¿Por qué, entonces, los neandertales y otros grupos finalmente desaparecieron del registro arqueológico? Hay pistas intrigantes de la demografía extraídas de análisis genéticos de alta cobertura de huesos humanos. El análisis de ADN de algunos neandertales tardíos muestra que tienen largos tramos de “homocigosidad”.

Esto es cuando uno hereda dos alelos en un locus génico que son idénticos en ambos padres. Esto que sugiere que esos padres deben haber estado estrechamente relacionados.

Esta y otras pruebas de genética de poblaciones y arqueología, apoyan la idea de que los neandertales probablemente vivían en grupos pequeños en general. Es muy probable que no más de 5.000 neandertales hayan vivido en Eurasia al mismo tiempo. Esta podría haber sido una diferencia clave en comparación con el Homo sapiens.

Un lento proceder de los humanos modernos, sin ninguna ventaja cognitiva o conductual sustancial, pudo haber relegado a los neandertales al olvido. Siempre nos hemos considerado únicos. Resulta que en el tiempo evolutivo esta singularidad no existió.

Tomado de http://Notaantrpologica.com/