La verdadera felicidad consiste en dejar ir el pasado y mirar hacia el futuro

La felicidad se busca dentro de ti y no afuera. La verdadera felicidad consiste en dejar ir el pasado y mirar hacía el futuro

Hay que aprender a soltar para avanzar


A veces el pasado nos puede atrapar cada vez que pensamos en ello. El pasado tiene ese poder para hacernos creer que aún podemos cambiar las cosas, pero no es así. Lo que decidimos ya pasó, ahora es momento de seguir adelante. Cuando has decidido eso, el mundo parece verse distinto. Los miedos, las ideas, el pasado desaparece por completo y lentamente empiezas a ser tú nuevamente.

Hace unos meses decidí comenzar a construir mi futuro de manera consciente, donde la gente que ya no quiera estar en mi vida es bienvenida a salir de ella. En ese momento me di cuenta del enorme poder que tenemos en las manos y se llama “capacidad de elección”.

Tú eliges como quieres que sea tu futuro, sólo necesitas no alejarte de él.

Aprendiendo a dejar ir

Aferrarse a una idea solo porque se ha apegado a ella crea ansiedad . Una vez que se separa de un resultado deseado, puede dejar de preocuparse por él. La verdad es que la mayor parte del apego tiene que ver con el control y el control es una ilusión. Así que es mejor seguir adelante con tu vida, incluso cuando no consigues exactamente lo que quieres.

El desapego se puede describir mejor como un proceso de dejar ir. Te permite liberarte de situaciones difíciles y, en ocasiones, de personas difíciles. Al separarse de las experiencias pasadas y las expectativas futuras, puede mirar sus relaciones, tanto personales como profesionales, de manera más objetiva, lo que le brinda una mayor claridad.

Nada es tuyo: la vida te lo presta para que lo disfrutes mientras lo tienes

Creemos que necesitamos estos apegos para sentirnos felices, pero paradójicamente, dejarlos ir puede traer, al menos para algunas personas, un tipo de bienestar más profundo. Dejar ir nos hace conscientes de que los apegos en realidad abarrotan nuestras mentes y nos sobrecargan con demandas. Sentimos una sensación de claridad y apertura , ahora que nuestro “andamiaje de identidad” se ha disuelto. También hay una nueva sensación de energía, ya que nuestra energía mental ya no se consume manteniendo los apegos

Normalmente, como seres humanos estamos apegados a una gran cantidad de ideas: como esperanzas y ambiciones para el futuro, creencias e ideas sobre el mundo, conocimiento, estatus y logros. Al mismo tiempo, hay vínculos más tangibles como nuestras posesiones, nuestra apariencia y nuestros trabajos o roles. Todos estos archivos adjuntos apoyan nuestro sentido de identidad como andamios.

Todo con medida

Si bien los apegos no son del todo buenos, también el desapego no se recomienda en exceso ya que podemos perder la capacidad de conectar y empatizar con los demás: empatía y compasión. Nos lleva a estar a la distancia.

Ya lo decían los abuelos “hay que aprender a disfrutar”. Los sentimientos y las emociones están ahí esperando a que nos demos oportunidad de vivirlas.

Ahora que ya lo sabes, es momento de salir, descubrir el mundo y compartir este conocimiento con otros. 

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Tomado de https://viajeropeligro.com/