La Policía de Los Ángeles inició la operación para desmantelar los campamentos de protesta en el campus de la Universidad de California Los Ángeles, donde ciento de manifestantes contra la guerra en Gaza resistieron los primeros intentos.
Durante los operativos para desmantelar barricadas en el campamento de protesta, se produjeron enfrentamientos y arrestos. Elementos de la Patrulla de Carreteras de California (CHP) detuvieron a varios manifestantes, mientras que otros continuaron resistiéndose, empleando extintores de incendios contra los oficiales.
La policía detuvo a un puñado de personas en el campus, atándoles las muñecas con precintos de plástico. La acción policial se produjo después de que los agentes pasaran horas amenazando con realizar arrestos a través de altavoces si las personas no se dispersaban. Cientos de personas se habían congregado en el campus, tanto dentro de un campamento como fuera de él en señal de apoyo.
Mientras los helicópteros de la policía sobrevolaban, se podía escuchar el sonido de granadas aturdidoras, que producen una luz brillante y un ruido fuerte para desorientar y aturdir a la gente.
La policía derribó metódicamente la barricada de madera contrachapada, cercas metálicas y contenedores de basura del campamento e hizo una abertura hacia docenas de tiendas de campaña de manifestantes. La policía también comenzó a derribar marquesinas y tiendas de campaña.
Los manifestantes sostenían paraguas a modo de escudos mientras se enfrentaban a decenas de agentes. Algunos de los manifestantes advirtieron a sus compañeros que estuvieran preparados con agua en caso de que la policía lanzara gases lacrimógenos u otros irritantes.
El Intento Previo de la Policía
Las fuerzas del orden irrumpieron en un campamento establecido por estudiantes pro palestinos en el campus de la Universidad de California, Los Ángeles (UCLA). Los agentes, equipados con indumentaria antidisturbios, desmantelaron una barrera de madera contrachapada que los manifestantes habían erigido alrededor de su asentamiento en Dickson Plaza. Este enfrentamiento se desarrolló después de una prolongada tensión con los manifestantes antiisraelíes, culminando alrededor de la 1:54 a.m., hora local. Pese a la intervención policial, las fuerzas del orden se vieron compelidas a retirarse del área, momento en el cual se reanudaron los enfrentamientos.
Los manifestantes, que habían construido el muro de madera contrachapada como medida de fortificación, respondieron con vitoreo a la retirada policial, utilizando el momento para reinstalar rápidamente la barrera. Este incidente en UCLA destaca por la determinación de los manifestantes pro palestinos frente a la escalada policial. “Está a punto de caer”, fue el mensaje previo al operativo policial, según reportes del corresponsal de Fox News, Bill Melugin, quien también señaló que se esperaba que las fuerzas del orden ingresaran al campamento esa mañana tras varios llamados a los manifestantes para que desalojaran el área.
La estructura defensiva incluía paredes de madera contrachapada rodeando la mayor parte del campamento, situado detrás de una barandilla, donde los manifestantes se posicionaban con luces estroboscópicas y banderas palestinas, en un claro símbolo de resistencia. “Pude escuchar taladros eléctricos durante toda la noche mientras los manifestantes continuaban fortificando la barrera”,comentó Melugin, destacando la preparación y el compromiso de los estudiantes frente a la anticipada intervención de las autoridades, que incluía a la Patrulla de Caminos de California, el Departamento de Policía de Los Ángeles y la Oficina del Sheriff del Condado de Los Ángeles.
La intervención de la policía no solo fue repelida por los manifestantes, sino que culminó en la detención de al menos una persona, de acuerdo con el Daily Bruin, periódico estudiantil de UCLA. Este evento subraya la complejidad de los enfrentamientos y la volátil atmósfera en el campus, donde la manifestación antiisraelí se encontró con una fuerte oposición por parte de las autoridades.
Los estudiantes pro palestinos en UCLA habían levantado previamente un muro alrededor de su campamento como preparativo ante una redada policial anticipada, en una clara demostración de su firmeza y preparación ante posibles confrontaciones. Melugin estimó que cientos de manifestantes se encontraban detrás de las barreras, con cientos más apoyando desde el perímetro exterior formado por las autoridades.
Esta situación en UCLA refleja el tenso clima en el campus universitario, marcado por el conflicto entre los estudiantes manifiestamente antiisraelíes y las fuerzas del orden. La determinación de los manifestantes de mantenerse firmes ante la presión policial pone de manifiesto la profundidad de las convicciones políticas y sociales que animan su protesta.
Tomado de https://uh-noticias.com/
Más historias
Hezbolá dispara dos proyectiles contra Israel por primera vez desde el inicio de la tregua
Nueva vida en EEUU, ilusiones y desafíos
Las claves del mundo | Aranceles e invasión suave, turbio futuro para México con Trump