octubre 23, 2025
Huelguista de Hambre de Palestine Action Afirma Haber Sido ‘Castigado Retrospectivamente’ Tras la Proscripción

Huelguista de Hambre de Palestine Action Afirma Haber Sido ‘Castigado Retrospectivamente’ Tras la Proscripción

Tomado de https://novaramedia.com/

Una presa de Palestine Action (PA) en huelga de hambre ha declarado a Novara Media que su trato ha empeorado desde la proscripción, y afirma que está «siendo castigada retroactivamente».

Teuta «T» Hoxha, de veintinueve años, es una de las llamadas Filton 18, un grupo de 24 activistas de PA actualmente en prisión preventiva en relación con una acción en una fábrica de Elbit Systems en Filton, Gloucestershire, en agosto del año pasado. Los activistas de PA se han enfrentado a un trato invasivo y humillante en prisión incluso antes de la controvertida proscripción, con la activista musulmana Fatema Zainab sometida a burlas por parte de los funcionarios de prisiones y a repetidas pruebas invasivas de drogas y embarazo, según Cage International.

Desde que PA fue proscrita en julio, Hoxha, que ha estado encarcelada sin juicio desde noviembre de 2024, declaró a Novara Media que su trato por parte del personal de la prisión ha empeorado. Dice que el personal de la prisión la ha «llamado terrorista» y le ha «dicho que formo parte de un grupo terrorista».

Hoxha fue trasladada a la prisión mixta de HMP Peterborough desde la prisión de mujeres HMP Bronzefield el día en que los diputados votaron a favor de la prescripción de PA. A pesar de que técnicamente tiene una categoría de seguridad inferior a la de su antigua prisión, Hoxha afirma que las condiciones en Peterborough han sido mucho más duras. Esto, según ella, ha incluido su destitución de su puesto de asistente en la biblioteca de la prisión y la retención de su correo. Estas son las razones de su huelga de hambre, que lleva más de tres semanas.

Hoxha dice que a mediados de agosto, un representante de la lucha antiterrorista le informó de que estaba siendo vigilada por la Unidad Conjunta contra el Extremismo (JEXU), un grupo de trabajo dentro del servicio de prisiones y libertad condicional en Inglaterra y Gales. Dijo: «Después de esto, mi amiga y yo pensamos en eslóganes para camisetas: ‘Cinco cosas más extremas que yo: asados dominicales los miércoles, piña en la pizza’. Estaba demasiado cansada y hambrienta para pensar en más».

Hoxha añade que, aunque le dijeron que la razón por la que la habían despedido de su trabajo en la biblioteca era que podría tener acceso individual a otros presos en Peterborough, algo que antes podía hacer en Bronzefield. Dijo que los funcionarios de la prisión le dijeron que la orden de despedirla de su trabajo en la biblioteca procedía de JEUX tras la proscripción de PA.

«¿Cuándo se suponía que iba a desarrollar estas ideas extremistas?», pregunta Hoxha. «¿En la furgoneta de la prisión de Peterborough desde Bronzefield?».

Hoxha no ha sido acusada de ningún delito de terrorismo y niega los cargos de daños criminales, desorden público y allanamiento de morada con agravantes. Cuando el Servicio de Fiscalía de la Corona la acusó, dijo que presentaría que los delitos tenían una «conexión terrorista». No se espera que su juicio se celebre hasta abril de 2026.

Hoxha no fue detenida ni acusada de ser miembro de un grupo terrorista proscrito: PA no estaba proscrita en el momento de su detención. «¿Entonces por qué me castigan retroactivamente?», dijo.

La huelga de hambre de Hoxha comenzó el 11 de agosto, pero ella dice que el sistema penitenciario no la registró como iniciada hasta el 15 de agosto, lo que significa que su primer chequeo sanitario tuvo lugar el 19 de agosto, después de ocho días sin comer.

Hoxha dice que sólo fue atendida por una enfermera especializada el 27 de agosto, después de 16 días sin comer. The Observer informó de que recibió electrolitos por primera vez el 29 de agosto, después de 18 días sin comer.

Hoxha declaró a Novara Media que cuando se hizo su último control de salud el 2 de septiembre, su nivel de azúcar en sangre era de 3,8 mmol/l, por debajo del rango objetivo seguro, y sus cetonas de 5,2 mmol/l, un nivel peligroso.

En declaraciones a Novara Media, Hoxha afirma que se siente increíblemente fatigada y que tiene una erupción en las piernas. Pasa «de 15 a 18 horas durmiendo», incluso sentarse para hablar con la gente le hace sentir «náuseas» y su «mente se vuelve confusa y en blanco».

El trato que recibe Hoxha podría ser una violación del marco de la política de seguridad penitenciaria, que establece que el personal de la prisión «debe hacer todo lo posible para averiguar por qué el preso se niega a comer y/o beber y abordar las razones de su negativa». Las exigencias de Hoxha, que según ella son «minúsculas», son que se le restituya su trabajo en la biblioteca y que se le entregue su correo.

Dice que el grupo de evaluación de riesgos pathfinder (que opera bajo JEXU) ha «acordado que no supongo ningún riesgo en un trabajo de biblioteca», pero se niega a darle esta confirmación por escrito. Hasta la fecha, su trabajo en la biblioteca no ha sido restablecido.

Hoxha afirma que el 25 de agosto la prisión le pidió que firmara una exención por la que asumiría la responsabilidad de su propia salud y no podría demandar a la prisión si sufriera daños de salud a largo plazo o muriera. Se ha negado repetidamente a firmar.

HMP Peterborough está gestionada por Sodexo Group, una empresa privada especializada en servicios de alimentación y gestión de instalaciones.

Un portavoz de HMP Peterborough declaró: «No podemos facilitar información sobre personas concretas, sin embargo, podemos confirmar que todos los presos tienen pleno acceso a las comidas. Cualquier preso que se niegue a comer recibe evaluaciones médicas periódicas, electrolitos y apoyo de los clínicos, además de que se le ofrece apoyo para la salud mental. Además, si alguna vez se requiere asistencia hospitalaria por razones clínicas, se proporciona de inmediato. Esto está en consonancia con las políticas y reglamentos aplicados en todo el recinto penitenciario. También podemos confirmar que ofrecemos una amplia gama de oportunidades de educación y empleo dentro de la prisión. Aunque no todas las oportunidades son adecuadas para todos los presos, hay opciones para todos».

En septiembre, 75 profesionales médicos actuales y antiguos firmaron una carta dirigida a NHS England y a las autoridades penitenciarias, advirtiendo de que la vida de Hoxha podría correr peligro si no recibe la atención médica adecuada.

Hoxha declaró a Novara Media que negarse a comer es una cuestión de autonomía. «Tu cuerpo es la única forma de luchar contra el sistema, porque en todos los demás sentidos, te lo han quitado todo», dijo.

«Una enfermera me preguntó por qué hacía una huelga de hambre, [haciéndome] un daño a largo plazo por algo tan insignificante. Insignificante para ti tal vez, pero cuando el Estado te ha quitado tu casa, tu trabajo, casi dos años de tu vida en prisión preventiva, entonces la disposición natural es querer aferrarse a cada pequeña pizca de autonomía.

«Luchar por mi trabajo en la biblioteca no se trata sólo de estar en un espacio que para mí se siente como una bebida caliente en manos frías, sino de rechazar los ataques a mi persona».

La hermana menor de Hoxha, Rahma, de 17 años, dijo que a pesar de que Teuta está en prisión, «ella todavía me cuida y se preocupa por mí». Rahma atribuye a Teuta el mérito de haberla ayudado a obtener la nota más alta en sus GCSE de inglés este verano.

«Ellos [los funcionarios de prisiones] la han llamado terrorista y han dicho que es por las ideas que tiene», dijo Rahma. «Conozco a mi hermana y sé que es una persona cariñosa, es tía de todo el que conoce.

«En Bronzefield, cuidaba de las demás presas aunque no fueran sus amigas, siempre se aseguraba de que todo el mundo comiera, tuviera un programa de televisión que ver… Ayuda a sus compañeras de prisión con las cartas al juez y otros papeleos complicados.

«Incluso en las situaciones más difíciles, siempre se ha preocupado por los demás, y ahora creo que nos toca a nosotros preocuparnos por ella», añadió Rahma.

El estado de la atención sanitaria en HMP Peterborough ha sido objeto de escrutinio mediático. Chris Bennett, encarcelado en HMP Peterborough por actuar con Just Stop Oil, fue trasladado al hospital y se le diagnosticó una trombosis venosa profunda 10 días después de intentar por primera vez dar la voz de alarma al personal de la prisión sobre su salud.

Un portavoz de NHS England, que supervisa la atención sanitaria de los presos, dijo: «Se exige a los proveedores de atención sanitaria penitenciaria que presten asistencia de acuerdo con las especificaciones nacionales pertinentes, incluido el aumento del control clínico de los pacientes que rechazan líquidos y alimentos para garantizar un tratamiento seguro y adecuado».

«Necesito rehabilitación de la prisión», dijo Hoxha. «No sólo es cruel para los presos, sino que es cruel para el público creer que esta experiencia ofrece alguna rehabilitación».

Los activistas detenidos por su presunta participación en la acción de Filton -que interrumpió una fábrica de armas israelí- denunciaban un trato deficiente incluso antes de la proscripción de Palestine Action. En marzo, la maestra de escuela primaria Ellie Kamio dijo que estaba experimentando ataques de pánico «casi todos los días» en HMP Eastwood Park, y se había desmayado por un golpe de calor debido a la temperatura en su celda en múltiples ocasiones.

Los familiares de los Filton 18 también se enfrentaron a la detención: Emma, la madre de Ellie, fue detenida a los pocos días de la acción de Filton y recluida en régimen de aislamiento durante cinco días antes de ser liberada sin cargos. Emma Kamio dijo que estaba «traumatizada» y que su único delito era «criar a una joven con una gran brújula moral».

Otro activista de Filton 18, Will Plastow, describió las condiciones en HMP Wandsworth en mayo, incluyendo el hecho de haber estado encerrado las 24 horas del día durante ocho días de cada 35, incluyendo todos los viernes. Dijo que sólo pudo acceder al servicio de lavandería dos días y a una ducha caliente seis días de cada 35, y que no tuvo acceso a la biblioteca.

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