diciembre 13, 2024

Hay avances, pero la brecha de género aún es del 15% Liliana San Martín

ENTREVISTA: PATRICIA LÓPEZ NÚÑEZ/LALUPA.MX

FOTOS: RICARDO ARELLANO/LALUPA.MX

Aunque el panorama laboral para las mujeres en Querétaro ha presentado avances en los últimos años, todavía hay pendientes para que puedan gozar de un buen entorno en sus centros de trabajo, con condiciones que les permitan equilibrar sus demás facetas con la productiva, asegura Liliana San Martín Castillo, secretaria del Trabajo del estado de Querétaro.

Las mujeres queretanas, afirma, tienen un alto compromiso cuando se involucran en el ámbito laboral, pero todavía se vive una brecha de género del 15 por ciento, así que todavía “hay que hacer grandes esfuerzos para equilibrar la balanza”. Además, reconoce la necesidad de fortalecer el liderazgo de las mujeres porque “estamos más acostumbrados a ver presidentas al frente de alguna cámara empresarial, pero hoy yo no tengo una líder sindical, mujer, y eso habla que no es sencillo”.

Liliana San Martín admite las dificultades de las mujeres frente a un mundo laboral que no siempre les ofrece oportunidades. Lo sabe a partir de su propia experiencia, como estudiante que debió trabajar y ahora como trabajadora que es también jefa de familia.

“Entiendo perfectamente cuando hablamos de los retos y los sacrificios que hay que hacer, pero que a las mujeres nos toca construir puentes para otras mujeres”, asegura la secretaria del Trabajo.

Reducir la brecha de género

El 90 por ciento de la vida laboral de Liliana San Martín se desarrolló en la administración pública en el Poder Judicial, el Poder Legislativo, en el ámbito municipal y ahora en el estatal.  Originaria del estado de Morelos, es egresada de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM). En Querétaro estudió una especialidad en la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), al igual que una Maestría.

Como parte de las actividades de la dependencia que encabeza, añade que “puedo compartir que el estado de Querétaro en este ejercicio fiscal se reporta con un porcentaje de 15 por ciento en brecha de género, lo que, por supuesto, nos implica que todavía hay que hacer grandes esfuerzos para equilibrar esta balanza”, aunque existe un alto nivel de contratación de mujeres.

“Dentro de nuestros esquemas de reclutamiento los empleadores requieren mujeres y no sólo por el tema profesional, técnico, operativo, sino que tienen otro tipo de desempeño. Esto habla también del alto compromiso que tienen las mujeres cuando se involucran en el ámbito laboral con ciertas dificultades. Sobre todo, aquellas que son jefas de familia, que son la única cabeza de un hogar, que tienen que hacer esta mezcla de roles entre trabajar y estar al frente y al cuidado de los hijos, y cuando surge una particularidad en el caso de los hijos, regularmente lo que hacen es renunciar para regresar, o hacer emprendimientos que les posibiliten desde casa generar recursos. Eso todavía es una gran dificultad porque habla de los retos que tienen las mujeres para emplearse en un empleo formal y gozar de ciertas prestaciones porque priorizan el cuidado familiar”.

Sobre la brecha salarial, sostiene que cada vez es menor esa problemática. Recientemente el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) señaló que Querétaro registra una brecha salarial del 15 por ciento, lo que significa una diferencia de más de 98 pesos entre el salario que reciben las mujeres frente al salario que reciben los hombres por trabajo igual.

“En caso de los salarios cada vez es menos (la brecha salarial) porque aquí hemos hecho un ejercicio con las cámaras empresariales para garantizar una adecuada cultura organizacional en temas de género, que hombres y mujeres, en una misma categoría laboral tengan las mismas percepciones, y que hombres y mujeres puedan, en la misma igualdad de condiciones, ir teniendo escalonamientos en su carrera profesional. Lo que hemos advertido es que ya es mucho más adaptado al interior de las empresas, como parte de su esquema cultural garantizar que hombres y mujeres puedan percibir los mismos salarios”, insiste.

Sobre el acoso, señala que “sí hemos tenido algunos reportes que nos han presentado y hemos tenido algunos ejercicios que hemos realizado en un par de empresas. Incluso en alguna de ellas se formalizó denuncia, no solamente quedó en un protocolo de acoso o de hostigamiento, sino que además se hizo presentación de una denuncia y creo que fue un gran ejemplo para las mujeres que puedan alzar la voz y que haya un eco cuando ellas se están expresando”.

Respeto de compañeros y ajustes a la política laboral

Con el fin de generar mejores condiciones para las mujeres en los centros de trabajo, se puso en marcha la implementación de protocolos para evitar el acoso y el hostigamiento, además que las empresas trabajan en una adecuada cultura organizacional para facilitar la puesta en marcha de esos mismos protocolos y se promueve que los hombres aprendan a respetar a sus compañeros.

En materia de política laboral, “ha sido muy dinámico lo que cambiamos”, primero, porque es la primera vez que la Secretaría del Trabajo cuenta con una mujer como titular, ya que “históricamente era ocupada por hombres y me tocó también un cambio en el marco del esquema jurídico-laboral. Muy recientemente, después de décadas en el que el tema laboral no era tocado, de repente hubo muchas reformas en este sentido, y creo que también hubo mucha necesidad de adecuar nuestras estructuras administrativas y de manera puntual la que obedece a las y los buscadores de empleo, que sea mucho más efectiva”.

Para los cambios en favor de las mujeres, resalta que Querétaro tiene una característica: los empleadores necesitan perfiles especializados y calificados. “Por ello, implementamos uno de estos programas, solamente para el tema de capacitación y también que los esquemas de vinculación sean mucho más efectivos, ya no tanto irnos a los operativos que, por supuesto, se requieren, pero insisto, hoy los empleadores nos requieren, nos demandan, perfiles profesionales, en ingenierías, en esquemas de tecnología, mecatrónica”.

También cambió la formación profesional, “porque las carreras que se demandan en el campo laboral son bien distintas a las que se demandaban en mi generación, y esto ha sido muy visible”. Además, se enfrenta el gran reto de mantener el diálogo con todas las organizaciones sindicales y empleadores con la autoridad laboral.

Una de las metas, es lograr que más mujeres participen de manera activa desde los sindicatos, porque “en el sector empresarial ya estamos más acostumbrados a ver presidentas al frente de alguna cámara empresarial, pero hoy yo no tengo una líder sindical, mujer, y eso habla que no es sencillo. Sí las hay y muchos en la integración de comisiones sindicales. Ahí sí la participación de las mujeres es muy activa. Son las que lideran, las que son portavoces de propuestas, para cambiar lo que está ocurriendo al interior de una empresa, pero al frente de una organización sindical me encantaría visualizar a una mujer. Todavía no me toca, todavía no la hay. Ojalá apostemos para ello”.

Conciliación del empleo con la vida familiar

La Secretaria del Trabajo destaca que una característica de Querétaro es que no hay un problema de huelgas, pero no porque exista un gobierno opresor, sino porque hay oportunidad de dialogar y conciliar, toda vez que tanto las empresas como las propias organizaciones sindicales “sienten muy suya a la autoridad laboral y nos permiten inmiscuirnos en este tipo de diálogos, de negociaciones, de revisiones contractuales, de incremento de prestaciones, y nos permiten ser partícipes y ser ecuánimes también”.

Sin embargo, sí se requiere un trabajo adicional en favor de la conciliación entre la vida personal y la vida laboral, porque “en nuestra historia han sido las mujeres las que han tenido necesidad de adaptarse al mercado laboral y no el mercado laboral el que ha ofrecido posibilidades a las mujeres, sobre todo a las mujeres que son madres”.

“Nos falta todavía trabajar en ello. Hemos hecho esfuerzos para que al interior de las empresas haya infraestructura que favorezca, por ejemplo, las áreas de lactancia para las mujeres que son madres y que lo necesitan en los primeros meses. Hemos también fortalecido mucho la implementación de ludotecas, para que mientras ellas trabajan sus hijos estén siendo bien cuidados. Ha sido parte de nuestros programas fundamentales, visualizar que necesitamos apoyar en esquemas de cuidado familiar para que una mujer pueda desempeñar ambos roles y que lo haga sin sentirse sacrificando uno por otro”.

No obstante, esto requiere de varios esfuerzos, primero para hacer visible una problemática real que enfrentan las mujeres, después para presentar propuestas y políticas públicas efectivas ligadas con la problemática, de manera que “no solamente hoy se ha hecho visible, sino que tenemos empresas comprometidas en hacer un cambio, sobre todo porque hay necesidad de conservar este tipo de perfiles”.

“Cuando hago diálogo con las empresas que visitamos me dicen ‘me quiero quedar con ellas porque son buenísimas, son líderes, tienen un alto índice de productividad, pero tienen que equilibrar’. De los esfuerzos que hemos realizado en conjunto es que haya recurso público para que las empresas puedan implementar este tipo de infraestructura y que por supuesto que haya disposición para que lo hagan parte de su cambio de cultura organizacional”.

De manera personal, reconoce, la llena de grandes satisfacciones la oportunidad de cambiar la dinámica de vida de las personas a partir del empleo formal, “que es también una característica en nuestro estado. Querétaro mantiene los más altos índices de empleo formal y hay que incorporar a las mujeres en este sector, sea desde emplearlas o sea desde el autoempleo con nuestros esquemas que tenemos de acompañamiento desde su capacitación y desde que reciban equipo”.

Sobre todo, agradece la oportunidad de visitar los hogares de las trabajadoras o de intercambiar historias de vida personal y lo que implica para ellas tener un rumbo diferente a partir de que tienen empleo. “Para mí es de gran satisfacción y aliciente. No es una secretaría sencilla. Hay que dialogar con muchos sectores. De repente muchos de los temas de decisión que se toman aquí son externos, sobre todo cuando hablamos de incrementos, no es solamente hacer una solicitud, sino hacer un ejercicio con el rendimiento que se está teniendo, tanto del personal como los índices de proactividad de la empresa y la capacidad que tiene o no para concederlos. Entonces, creo que ha sido hasta hoy el más alto de mis retos”.

Le gustaría compartir con las mujeres que todavía hay muchos paradigmas para romper, “que esas categorías laborales donde no estamos acostumbradas a verlas es importante que nos hagamos visibles ahí, como hoy las mujeres conductoras del transporte público que antes teníamos una mujer conduciendo entre todas las unidades, de repente se nos perdía, y hoy tenemos cerca de 300 mujeres conduciendo estas unidades, y creo que poco a poco tenemos que ir apropiándonos de estos espacios porque siempre nos han pertenecido y cuando hablo de apropiar no es de sustituir o reemplazar a otro sexo”.

A partir de su experiencia en la Secretaría del Trabajo, puntualiza que “si tuviera que compartir algo que conozcan acerca de mí, creo que ha sido en el mismo sentido, que desde muy pequeña he tenido que hacer esta dualidad de estudiar y trabajar, de trabajar y ahora ser jefa de familia, que entiendo perfectamente cuando hablamos de los retos y los sacrificios que hay que hacer, pero que a las mujeres nos toca construir puentes para otras mujeres”.

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