El ex ministro y actual diputado del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Jorge Rodríguez será el presidente de la Asamblea Nacional que asumirá por los próximos 5 años en el país caribeño.
Rodríguez es hermano de Delcy Rodríguez, vicepresidenta y ministra de Finanzas, es del riñón del presidente Nicolás Maduro y se impuso por sobre el número 2 del chavismo, Diosdado Cabello, quien buscaba volver a ocupar el cargo que tuvo en el período 2010-2015.
A pesar de haber perdido la compulsa interna, Cabello fue quien anunció la nueva directiva por cadena nacional y dijo: «Tenemos una propuesta basada en una revisión que hemos hecho y una propuesta que estoy seguro que va a contar con el apoyo de todo el país».
Asimismo, destacó que propondrán para el cargo de vicepresidente a Iris Varela y para la segunda vicepresidencia a Didalco Bolívar. Con respecto a los cargos de secretaria y sub secretaria, los mismo tendrán como opción a Rosalba Gil e Inti Hinojosa, respectivamente.
Diosdado pulsea con Maduro para volver a controlar la Asamblea Nacional
Como compensación, Maduro anunció que Diosdado quedará como líder del bloque chavista llamado Gran Polo Patriótico dentro de una AN con mayoría absoluta chavista.
Como anticipó LPO, Rodriguez no solo era el preferido del presidente sino también de la oposición que formará parte de la nueva Asamblea Nacional, ya que, es quien encabeza la Mesa Nacional de Diálogo con la oposición y, si bien están disconformes por no integrar la directiva, prefirió el diálogo con el flamante presidente que con el ala más dura de Diosdado.
El eje Jorge-Delcy forma parte de la nueva reconfiguracion del oficialismo y tendrá la tarea de poner a la Asamblea como motor de acuerdos de inversión con China y Rusia e iniciar diálogos con el bloque de países que no reconocen al gobierno. Desde el chavismo cuentan que esto último «no tendrá logros visibles en el corto plazo» pero confían en avanzar en el mediano.
Diosdado pulsea con Maduro para volver a controlar la Asamblea Nacional
En ese sentido, el Financial Times informó que tanto la Unión Europea como el futuro gobierno de Joe Biden en Estados Unidos se inclinarían por reconocer a Guaidó como líder de la oposición pero no como jefe de estado y añadió que «funcionarios del gobierno Trump reconocen que la oposición necesita renunciar a pretensiones de ser un gobierno en la sombra y volver a hacer política en las calles».
Por último, del lado del bloque de partidos que apoyan a Juan Guaidó se encuentra en su peor momento. Por un lado, están los que acompañan la estrategia de un gobierno en el exilio y una conducción prácticamente virtual del país y quienes decidieron renunciar a esa tarea y barajan volver a la disputa electoral en las elecciones regionales de este año.
Además, el «presidente interino» y su entorno más cercano están involucrados en supuestos hechos de corrupción. El diario estadounidense The Washington Post reveló detalles sobre la trama de corrupción que involucra a varios «funcionarios» de su gobierno, entre ellos Javier Leonardo Troconis, supuesto Comisionado Presidencial para la Gestión y Recuperación de Activos.
La investigación incluyó más de 20 entrevistas y una revisión de documentos, incluidos los posibles contratos, reveló múltiples acuerdos propuestos que involucraban a Troconis que habrían requerido lo que algunos miembros de la oposición han caracterizado como pagos grandes e inusuales.
Son informes sobre contrataciones, fraudulentas y sobornos, firmadas ilegalmente por Troconis y, además del caso Petrocaribe, hay otro caso sobre una deuda petrolera en Paraguay y una cuenta del Ministerio de Alimentación por 1700 millones de dólares en Reino Unido.
De acuerdo con The Washington Post, Troconis condonó la mitad de la deuda de Paraguay con Petróleo de Venezuela, Pdvsa y acordó comisión de 26 millones de dólares para un abogado argentino.
«Según dos borradores del contrato no ejecutado obtenidos por The Post, el acuerdo habría condonado la mitad de la deuda de 269 millones de dólares que Paraguay acepta que le debe a Venezuela. (Venezuela calcula la cifra en 290 millones de dólares)», cita el medio.
José Ignacio Hernández, a quien Guaidó designó en 2019 como su procurador, dijo que «se negoció sin el conocimiento de los supervisores de la industria petrolera designados por Guaidó. Habría pagado lo que Hernández llamó una comisión «desproporcionada» a un abogado argentino llamado Sebastián Vidal. En el segundo borrador del contrato, Vidal «habría recibido el 20 por ciento del acuerdo, o más de 26 millones de dólares».
Javier Troconis Calderón es un contratista de la estatal Petróleos de Venezuela S.A (Pdvsa) en la Faja Petrolífera del Orinoco a través de la compañía de servicios ambientales T&C Services. En febrero del 2019 fue designado «director de Citgo» y en agosto del mismo año, comisionado para recuperación de activos.
Así, con es espacio liderado por Guaidó desgastado y sin acceso a verdaderos resortes estatales , y una oposición reducida a la mínima expresión en el nuevo Congreso, el chavismo tiene todo servido para recuperar el poder estatal que le faltaba y consolidar su control absoluto del país.
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