‘Amores perros’: 25 años de un clásico del cine mexicano

<!–

–>

La historia del cine mexicano se ha caracterizado por el desarrollo de importantes películas. Sus propuestas ha sido tan originales que han hecho época. Los filmes de Emilio «El Indio» Fernández, Luis Buñuel, Felipe Cazals, entre otros directores y directoras, son parte de nuestro acervo cultural. Una de esas producciones no solo fue exitosa, sino también inauguró un renacimiento de la cinematografía nacional y su influencia en ámbitos internacionales; se trata de Amores perros, de Alejandro González Iñarritu y Guillermo Arriaga, la cual recién cumple 25 años.

La relevancia cinematográfica de Amores perros

Estrenada el 16 de junio del año 2000, Amores Perros constituyó todo un suceso fílmico. La película fue la opera prima como director de Alejandro González Iñárritu y contó con el guión del escritor Guillermo Arriaga. Estuvo protagonizada por Gael García, Emilio Echeverría y Goya Toledo, junto a un amplio elenco. La novedad fue el planteamiento de la trama del filme; constó de tres historias distintas y no lineales que se cruzan reiteradamente sin que respectivos personajes lleguen a conocerse. Un accidente automovilístico es el detonante y la convergencia entre peleas ilegales de perros, una modelo caída en desgracia y un antiguo guerrillero que vive en la indigencia.

Arriaga más tarde declaró que la idea de la no linealidad de la trama surgió de su esfuerzo por incorporar al lenguaje cinematográfico este elemento que ya existía en la literatura, como consta la novela El sonido y la furia de William Faulkner. Además, una experiencia de este escritor con un accidente automovilístico y un perro que tuvo fueron la anécdotas que inspiraron las historias de las películas.

Por otro lado, algo que también tuvo un enorme impacto fue que se retrató con verosimilitud a la Ciudad de México de aquél tiempo. La profusa fotografía de Guillermo Prieto mostró como era la capital de la República a inicios del siglo XXI y el nuevo milenio. Los contrastes entre la luz y las sombras, los cuerpos atravesados por el dolor, todo respiraba con profusión y creaba una continua tensión en la película.

El contexto histórico

Algo que dejó claro Amores perros fue que todo estaba cambiando en México en el año 2000. La República del siglo XX y del régimen del Partido Revolucionario Institucional (PRI) había dado paso a un México más dinámico, vertiginoso y complicado. Si bien este proceso había iniciado desde finales de los años ochenta, en aquél momento parecía como si todo el país se estuviera incorporando a una nueva lógica.

La llegada de un nuevo partido al gobierno federal, las secuelas de la apertura del mercado nacional al libre comercio, así como las tensiones sociales y políticas que abrió la rebelión zapatista en Chiapas en 1994, hicieron que la perspectiva sobre la realidad en México fuera menos maniquea y más matizada.

Por eso la película fue bien recibida en el país, ya que reprodujo toda esa complejidad general. En su momento recaudó 95 millones de pesos, lo que la convirtió en la quinta película mexicana más taquillera en su época. Y es que en ese momento el cine nacional había ido recuperando prestigio poco a poco tras la crisis de dos décadas atrás; Amores perros terminó por consagrarlo internacionalmente de nueva cuenta.

Reconocimientos de Amores perros

La película ganó 11 premios Ariel de la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas.​ También fue reconocida con un BAFTA como «mejor película en lengua no inglesa». Así mismo, obtuvo el premio de la crítica en el Festival de Cannes y el Tokyo Sakura Grand Prix a la mejor película. Además, estuvo nominada al Globo de Oro por mejor película en lengua no inglesa y al premio Óscar en la misma categoría.​

Actualmente, Amores perros ocupa el lugar 8 dentro de la lista de las 100 mejores películas mexicanas, según la opinión de 27 críticos y especialistas de cine nacionales. El enlistado fue publicado por el portal Sector Cine en junio del año 2020.

Un último dato: su banda sonora

No solo la historia, la forma en la que se retrató y la complejidad narrativa de Amores perros hacen que la película sea un clásico. Su vigencia e influencia se sustentan también en su banda sonora. Canciones como «Lucha de gigantes» de Nacha Pop, «Si señor» de Control Machete, entre muchas otras, hicieron que el filme fuese memorable.

<!–

–>

Tomado de https://www.mexicodesconocido.com.mx/