<!–
–>
La actual Ciudad de México se asentó originalmente sobre lo que alguna vez fue Mexico-Tenochtitlan. Alrededor de ésta, otras urbes y pueblos fueron sometidos a la hegemonía mexica. Posteriormente, el crecimiento de la capital del país absorbió estas poblaciones hasta integrarlas en ella. En la alcaldía Azcapotzalco se encuentra una de ellas; se trata del ancestral pueblo de San Juan Tlilhuaca.
Tlihuaca: uno de los pueblos de la Azcapotzalco tepaneca
El pueblo de Tlilhuaca nació en el periodo Posclásico Tardío (1200-1521 d.C.), como parte de los dominios de Azcapotzalco. La capital de los aguerridos tepanecas fue fundada en el siglo XIII, por lo que es más que probable que la población, al formar parte del señorío azcapotzalca, fuera establecida en dicho siglo. Su nombre está en lengua náhuatl y quiere decir «Lugar de lo negro» (tliltic: «negro», hua: «de» o «poseer» y ca[n]: «lugar»). Parece ser que el topónimo hacia referencia a que la localidad se dedicada a las prácticas de magia, herbolaria, medicina tradicional y otros saberes antiguos de Mesoamérica. Otro aspecto interesante es que su fiesta principal estuvo, probablemente, consagrada al dios Xochipilli, señor del canto y las flores.
Sin embargo, el poderío de Azcapotzalco llegaría a su fin en el siglo XV. Y es que sus acérrimos enemigos, Mexico-Tenochtitlan, Texococo y Tlacopan, junto a Tlaxcala y otros pueblos del Valle de México, los vencieron. La capital tepaneca caería en manos mexicas en el año de 1428. Inmediatamente los tenochcas y sus aliados capturaron las poblaciones del otrora orgulloso señorío, entre ellas Tlilhuaca. Allí establecieron una guarnición permanente, por lo que gente de Tenochtitlan se avecindó en el lugar.
San Juan Tlilhuaca y sus dos santos
Tras la caída de Mexico-Tenochtitlan el 13 de agosto de 1521, las poblaciones de la región ahora pasaron a estar bajo control hispánico. Fue así que al inicio de la evangelización, Tlilhuaca fue consagrada a San Juan Bautista, por lo que pasó a llamarse San Juan Tlilhuaca; de hecho, la fecha de la fiesta de este santo (24 de junio) correspondería a la celebración dedicada a Xochipilli.
Sin embargo, los dominicos, los encargados de evangelizar a los vecinos del pueblo, tuvieron que levantar dos capillas: una dedicada a San Juan Bautista, la cual se volvió la cabeza del barrio de San Juan Tepaneca, y otra dedicada a San Juan Evangelista, corazón del barrio de San Juan Mexicano. Y es que no olvidemos que la población de la comunidad estaba compuesta tanto por tepanecas como por mexicas. Para evitar problemas y enfrentamientos, los religiosos optaron por esta solución.
Esto cambiaría a finales del siglo XVI, cuando el virrey Álvaro Manrique ordenó que el culto se unificara en un solo santuario. Para ello se derribaron las antiguas capillas y se inició la construcción de una parroquia, obra que concluiría iniciado el siglo XVII. Al templo se le llamó «la iglesia de los dos San Juanes», ya que se le dedicó a ambos santos. En la actualidad su nombre es Parroquia de San Juan Bautista.
La fiesta patronal y la importancia de San Juan Tlilhuaca
A pesar de que se unificó el culto en un solo templo, los descendientes de tepanecas y mexicas siguieron divididos. Por un lado, los primeros realizaban la fiesta patronal correspondiente el 24 de junio, mientras que los segundos el 27 de diciembre. Durante siglos compitieron para ver quienes organizaban los festejos más grandes y bellos. Ya entrado el siglo XX continúo dicha escisión, hasta que en los años cuarenta ambos barrios se unificaron para la celebración patronal actual que conocemos, dedicada exclusivamente a San Juan Bautista.
Y es que las fiestas de este santo patrono son uno de los ejes de la vida de Tlilhuaca. En la actualidad, la población es uno de los 25 pueblos originarios que componen la alcaldía Azcapotzalco. Su particular belleza también se funda en el eje vida-muerte del pueblo, representado en la calle de piedra roja que une la Parroquia de San Bautista con el Panteón de San Juan Tlilhuaca, único en toda la ciudad ya que es administrado comunalmente por los vecinos. Este camino se vuelve un sitio especial durante el Día de Muertos.
La localidad está llena de casas antiguas de vivos colores y calles empedradas que conviven con edificios de departamentos y negocios locales, todos ellos próximos a la estación Aquiles Serdán de la Línea 7 del Metro. Por si fuera poco, este pueblo tiene leyendas muy arraigadas, como la de la Glorieta de los Ahuehuetes, que según se dice, fueron plantados por siete sabios en un ojo de agua del río de los Remedios. Por todo ello, San Juan Tlilhuaca es uno de los pueblos más antiguos de la Ciudad de México; su preservación en el tiempo ha significado la custodia de la memoria histórica y comunitaria de la capital del país.
¿Quieres escaparte a Ciudad de México? Descubre y planea una experiencia inolvidable
<!–
¿Te interesa el mundo del emprendimiento?
Conoce Emprendedor.com el medio lider en contenido de Ideas de Negocio, Startups, Finanzas, Noticias para emprendedores, Franquicias, Marketing, Inspiración, síguenos y proyecta lo que eres.
¿Quieres ser un emprendedor o emprendedora?
Conoce Emprendedor.com el mejor contenido de Ideas de Negocio, Startups, Franquicias, e Inspiración, síguenos y proyecta lo que eres.
–>
Tomado de https://www.mexicodesconocido.com.mx/
Más historias
“Sparks” de Coldplay debuta en el Top100 de Billboard 25 años después de su lanzamiento
Mujer del Peñón: la más antigua habitante del Valle de México
Feliciano Peña, artista mexicano que dignificó el paisaje sin distorsión