Jabari, la jirafa bebé que nació en el Zoológico de Chapultepec y derritió corazones

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Jabari, la jirafa bebé que llegó al Zoológico de Chapultepec robó miradas, corazones y sonrisas. Esta cría de Giraffa camelopardalis nació el 30 de diciembre de 2024, y apenas unos meses después, ya se ha convertido en toda una celebridad. Sin embargo, la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) de la Ciudad de México, informó de su nacimiento el pasado 29 de mayo.

Su nombre, que en suajili significa valiente, le queda como anillo al dedo: desde sus primeras horas de vida demostró fuerza, salud y una energía inconfundible. Jabari es hijo de Luna y Valentino, dos jirafas adultas que forman parte del Bioma de la Sabana Africana, una de las áreas más emblemáticas del zoológico.

Allí comparte espacio con cebras, antílopes y grullas, en una recreación ambiental que busca ofrecer bienestar físico y emocional a todas las especies que ahí habitan.

La llegada de Jabari, un símbolo de esperanza

El nacimiento de Jabari fue celebrado con emoción por la Sedema de la Ciudad de México y la Dirección General de Zoológicos y Conservación de la Fauna Silvestre (DGZCFS). Su nacimiento no solo suma una nueva vida al zoológico, sino que representa una importante contribución a la conservación de su especie, actualmente catalogada como vulnerable en la Lista Roja de la UICN (Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza).

La gestación de una jirafa dura aproximadamente 14 meses. En este tiempo, el equipo médico y de cuidado animal del Centro de Conservación de Vida Silvestre de Chapultepec se mantuvo atento a la salud de Luna. El 30 de diciembre, finalmente, Jabari vino al mundo, y desde entonces su desarrollo ha sido óptimo.

¿Cómo se cuida a una jirafa en Chapultepec?

Las jirafas en el Zoológico de Chapultepec reciben cuidados especializados. Su dieta está diseñada para mantener su sistema digestivo en equilibrio y su estructura ósea fuerte. Comen alfalfa, avena, pellets especiales y hojas frescas. Pero su bienestar no depende solo de la alimentación: también participan en actividades de enriquecimiento que estimulan sus sentidos, su curiosidad y su conducta natural.

Estas dinámicas incluyen el uso de estructuras altas para fomentar su comportamiento de forrajeo y juegos que promueven el movimiento y la exploración. Los cuidadores también entrenan conductas colaborativas con las jirafas, como permitir revisiones médicas sin necesidad de inmovilizarlas, lo que refuerza su confianza y bienestar.

Jabari es un emblema del compromiso por la vida silvestre

Más allá de su ternura, Jabari simboliza el esfuerzo diario que realiza la Dirección General de Zoológicos y Conservación de la Fauna Silvestre para proteger la biodiversidad. Su nacimiento no fue casualidad, sino resultado de un programa de conservación cuidadosamente planificado. El objetivo: mantener poblaciones saludables de especies en riesgo y fomentar la educación ambiental entre los visitantes.

Si visitas Chapultepec próximamente, no dejes pasar la oportunidad de conocer a Jabari, la jirafa que ha robado la atención en la Ciudad de México.

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–>Tomado de https://www.mexicodesconocido.com.mx/