El laberinto del mundo
José Antonio Lugo
Seguimos revisando el extraordinario libro Veza y Elías Canetti: cartas a Georg: Amor, literatura y exilio en tiempos oscuros, 1933-1948, publicado por Galaxia Gutenberg a partir de la edición alemana, publicada, ni más ni menos, por el Ministerio de Arte y Cultura de Austria. Es una mina de información, llena de vetas literarias que vale la pena explotar.
I. La lengua española.
Los Canetti eran judíos sefarditas. La primera lengua del futuro Premio Nobel de LIteratura y de su hermano Georges fue el ladino. Al respecto, Elías Canetti, en una carta a Georg del 3 de diciembre de 1945, señala: «Te escribo en alemán, ¿no te resulta desagradable, verdad? Las lenguas posteriores se fueron superponiendo todas, a decir verdad también el alemán; lo que más me gustaba es escribir en español, pero en nuestro propio español antiguo, ríete. Resulta extraño que, durante la guerra, los dos, por separado, hayamos frecuentado la literatura española. Yo quería recomendarte a Gracián, pero también a Quevedo, un autor satírico casi tan grande como Swift. Ahora no pasa una semana en la que no lea un poco de español. Me gustan particularmente los antiguos romances, que están mucho más próximos a nuestra lengua madre española. Y más adelante, cuando llegue a dominar totalmente el inglés y pueda escribirlo como el alemán, tengo la ambición de escribir en español».
Imaginar una novela de Canetti escrita en español: absoluta locura…
II. La bomba atómica.
En La provincia del hombre, su diario, Canetti escribió, al enterarse de la explosión de la bomba atómica sobre Hiroshima: «Lo más pequeño ha vencido, paradoja del poder. Tu ineficacia durante estos mismos años te ha colocado del mismo lado de aquellos que durante el mismo tiempo han estado trabajando para la destrucción». Esta frase me conmovió desde que la leí por primera vez. Su humanismo es conmovedor. ¡Canetti se asume responsable, por no haber hecho lo suficiente! Una lección para todos nosotros…
Ahora bien, el 15 de agosto de 1945 Veza le escribió a Georg: «Tu hermano está de un humor extraño, como sólo puede estarlo un escritor… por la bomba atómica. En efecto, quedó tan apesadumbrado que se negaba a comer y casi no quería seguir viviendo, pues pensaba que la bomba iba a interferir entre su inmortalidad y, quién sabe, la mortalidad misma. Fue una crisis severa. Él cree que la bomba atómica es algo tan avasallador que reduce el efecto avallasador de su gran obra (Auto de Fe). Al final, todo esto tuvo un efecto positivo en su obra, en la que ahora parece trabajar más de prisa, por miedo a que nunca se publique».
III. Canetti, ghostwriter.
Elías, mientras seguía casado con Veza, mantuvo relaciones con diversas mujeres en Inglaterra, particularmente con la novelista Iris Murdoch y con Friedl Benedikt, quien falleció a la temprana edad de 36 años víctima del síndrome de Hodgkin. Lo anterior no sería importante si no fuera porque Veza, porque lo sabía con certeza o porque estaba celosa, afirma que Canetti escribió las novelas de ella y que la ayudó a publicarlas, a pesar -según Veza- de que eran mediocres.
En una carta de Veza a Georg (agosto de 1946), ella le dice: «Él tiene todo el poder del mundo, y de una auténtica nada -me refiero a la mencionada Sebastl, que no es otra que Friedl-, ha hecho una respetable escritora. Porque como ella no tiene tiempo para sentarse con él mientras Canetti le escribe los libros, no hay ningún nuevo libro de él en perspectiva, y tu hermano está desesperado».
Muero por leer los libros de ella, quizá -como afirma Veza- escritos por Canetti, para hacer un estudio comparado y ver si encuentro una impronta literaria de Elías. En el sitio Abe Books de Gran Bretaña se encuentra a la venta, por 632 libras, la primera edición (1950) del libro The dreams, de Anna Sebastian, seudónimo de Frield Benedikt. Veremos si hay algo más o si se tradujo algo en español.
En el próximo Laberinto para los lectores de Morfemacero seguiremos todavía con Veza, Elías, Georg, Iris Murdoch y Friedl Benedikt, «la constelación Canetti».
Tomado de https://morfemacero.com/
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